C.M.LÓPEZ Madrid | viernes, 06 de abril de 2018 h |

Nueva jornada de huelga para la profesión médica, aunque esta vez en la Comunidad de Madrid. Parece que las movilizaciones de antes de Semana Santa fue la punta de lanza para animar a las profesiones a continuar en la lucha por “recuperar los derechos perdidos”.

Según apuntan desde la Asocación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), impulsores de esta movilización, un total de 16.000 médicos asistenciales y unos 5.000 MIR del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) han estado llamados a la huelga de 24 horas.

Como indicaron en una rueda de prensa anterior a los paros, el motivo es debido a “los agravios, maltratos y desprecios continuos”.

Los principales motivos, tal y como explicaron el secretario general de AMYTS, Julián Ezquerra, y la coordinadora de delegados de Amyts, Mónica Alloza, se centran en la negociación de la jornada de 37,5 horas semanales de los empleados públicos que “la Administración Sanitaria no deja ejercer a los médicos, aplicándoles descuentos que suponen un agravio con respecto al resto de trabajadores de la administración”.

Del mismo modo, al igual que se reivindicó a nivel nacional, los médicos demandan una carrera profesional para todos los facultativos, “con independencia de su vinculación laboral”. Según estiman los facultativos no fijos “son más del 30 por ciento”.

Por otra parte, insisten en la necesidad de conformar un convenio colectivo para los MIR en cuyas condiciones laborales hay un vacío legal.

Finalmente, piden que se articulen medidas para solucionar la sobrecarga asistencial que sufren los médicos del Servicio Madrileño de Salud cuya plantilla está un 20 por ciento por debajo de las necesidades reales, “lo que da lugar a que un 8,5 por ciento del total de la población madrileña con derecho a asistencia sanitaria (6.659.000 ciudadanos) se encuentre en alguna de las listas de espera”, apuntan los responsables de la organización.

De hecho, destacan que esta sobrecarga está generalizada, ya que la sufren más del 50 por ciento de los médicos de la sanidad madrileña. “Una sobrecarga que afecta, por supuesto a los médicos, pero también y muy directamente a los pacientes”. Explican también que esta situación se produce por la combinación de un incremento de necesidades asistenciales y de “múltiples recortes de los recursos disponibles”.

Enfermería

Quién tampoco está boyante es enfermería. Como explicó el sindicato madrileño Satse, los enfermeros “no están dispuestos a que se retribuya a la baja la carrera profesional de enfermería y fisioterapeutas”.

Según ha informado Satse Madrid en un comunicado, para los próximos días está convocada la Mesa Sectorial de Sanidad que abordará, entre otros temas, esta cuestión para los profesionales del Sermas.

En este sentido, el colectivo explica que no aceptarán el modelo que proponen desde la Comunidad de Madrid, e instan a la Administración a que cumpla la normativa vigente y apruebe la carrera profesional en los términos pactados en 2007. “Los profesionales no fijos no tienen la culpa de que no hayan convocado OPEs, con creación efectiva de empleo, en los últimos años ni tampoco tienen la culpa de que la Administración sanitaria no les haya hecho interinos durante estos últimos años”, aseguran.

El problema radica, a juicio de Satse, es que numerosos profesionales —eventuales— acumulan años y trabajo en el Sermas pero no se les reconoce el nivel de carrera que les corresponde, por lo que solo se les contabiliza los años trabajados como interinos. “La carrera profesional tal y como se está planteando perjudica muy gravemente los intereses de enfermeras, enfermeras especialistas y fisioterapeutas ya que son ellos son los que más sufren la aplicación del denominado factor condicionante o que no se respete el porcentaje, en cuanto a retribuciones, que corresponde a estos profesionales sanitarios”, lamentan.

Con todo, ante esta situación el Consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz-Escudero, ha señalado que el acuerdo sobre el complemento “está muy cerca”, ahora que ya existe una partida presupuestaria.


Demandan una carrera profesional, “con independencia de su vinculación laboral”



Los sindicatos insisten en que la sobrecarga está generalizada, y la sufren más del 50 por ciento de los médicos