Concienciar a las autoridades sanitarias de la importancia de las Unidades del Dolor es uno de los objetivos de las Sociedad Española del Dolor (SED). Así lo afirmado Juan Antonio Micó Segura, presidente de la SED, durante el encuentro de presentación del XVI Congreso de la Sociedad Española del Dolor (SED) que, bajo el lema “Avanzando junto al paciente en el tratamiento del dolor”, expertos de diferentes disciplinas compartirán las últimas investigaciones en materia de dolor.
Tal y como ha destacado María Dolores Rodrigo, presidenta del Comité Organizado del XVI Congreso de la SED, “el desarrollo de las Unidades del Dolor va muy lento y es una situación muy lamentable que una pequeña proporción de los pacientes no pueda recibir un tratamiento específico en estas unidades por falta de recursos”. Según los estudios europeos, solo entre un 10-16 por ciento de los pacientes son remitidos a las Unidades del Dolor. El Resto son atendidos en atención primaria.
Asimismo, la presidenta del comité ha incidido en que estas unidades tienen que estar formadas por especialistas de diferentes disciplinas pero con formación e interés en la patología del dolor, “Las Unidades del Dolor son las que tienen que tener los recursos y las habilidades para tratar el dolor grave ya que sabemos que el tratamiento especializado es el que mejor resultados obtiene y un dolor agudo tratado incorrectamente puede derivar en un dolor crónico”, señala la especialista quien también indica que debería haber una unidad por cada hospital.
Asimismo, Micó ha insistido en que las necesidades no cubiertas sobre el dolor “han sido comunicadas a todos los partidos políticos pero ninguno lo ha incluido en su programa electoral”. Actualmente “hay 184 unidades del dolor de 800 posibilidades”, añadía.
Nuevas tecnologías
Durante el congreso las sesiones se abordarán las nuevas tecnologías en el tratamiento del dolor, la nanotecnología, la realidad virtual inmersiva y las bases genéticas de la respuesta al tratamiento, entre otros temas. También se van revisar los avances actuales tanto en tratamiento farmacológico como en procedimientos más y menos invasivos en los diferentes tipos de dolor. Desde ese punto de vista, destaca los talleres, cursos y las comunicaciones, en las que se podrá hablar directamente con los autores sobre las últimas investigaciones.
En este sentido Carlos Goicoechea, presidente del Área Básica del Comité Científico del Congreso, ha resaltado la importancia de la formación. “Curar la enfermedad no es sinónimo de curar el dolor. Es un error no tratar el dolor en una enfermedad ahora que ya conocemos las dianas de la investigación”.