Esther Martín del Campo Madrid | viernes, 03 de enero de 2020 h |

El socialista Pedro Sánchez se juega su investidura como futuro presidente del Gobierno este fin de semana en la Cámara Baja. Al cierre de esta edición, el Consejo Nacional de Esquerra Republicana de Catalunya ha confirmado que se abstendrá en la segunda votación, facilitando así un gobierno de coalición progresista PSOE-Unidas Podemos. Sin embargo, sigue siendo clave al menos la abstención de Bildu, BNG y Coalición Canaria, cuya posición se conocerá a lo largo de este viernes.

En paralelo a las negociaciones, PSOE y Unidas Podemos presentaban esta semana un acuerdo programático que dedica un total de 14 puntos a sus prioridades en materia de sanidad y refleja, en la práctica, compromisos electorales ya adquiridos por ambas formaciones.

En el horizonte común destaca la necesidad de avanzar en el blindaje del sistema público de salud, apostando por una sanidad basada en la gestión pública directa. Para ello, ambos partidos se comprometen a revisar la Ley 15/1997 de habilitación de nuevas formas de gestión del Sistema Nacional de Salud y el conjunto de los mecanismos normativos que han abierto la puerta a privatizaciones del sistema.

Aseguran así que se impulsará la recién creada Comisión, integrada por expertos y expertas del ámbito sanitario, organizaciones sindicales, profesionales y de pacientes, así como colectivos sociales, y que llegado el caso se analizará la situación y se definirán las líneas para revisar dicha ley en el plazo de seis meses.

El acuerdo también contempla incrementar los recursos destinados al Sistema Nacional de Salud, en el marco del Consejo Interterritorial, hasta lograr que se alcance el 7 por ciento del PIB en 2023, así como aumentar los recursos para dotar el Fondo de Cohesión Sanitaria.

Los profesionales también están en el punto de mira del hipotético futuro gobierno. De hecho, se comprometen a mejorar las condiciones del personal sanitario agilizando el proceso para garantizar el cumplimiento del II Acuerdo en materia de sanidad e impulsando un programa de retorno de los profesionales que han tenido que salir a trabajar en sistemas sanitarios fuera de España.

En el documento, PSOE y Unidas Podemos abogan por impulsar las modificaciones necesarias para garantizar el derecho a la protección de la salud mediante un acceso universal al Sistema Nacional de Salud, trabajando de forma coordinada con las comunidades autónomas para garantizar una aplicación homogénea.

La eliminación progresiva de los copagos, la incorporación de la atención a la salud bucodental en la cartera de servicios del SNS, la renovación de la tecnología y la digitalización sanitaria o la atención especial a los afectados por enfermedades raras completan, junto con la eficiencia y la transparencia en la política de fijación de precios con la industria farmacéutica, conforman las prioridades sanitarias del nuevo gobierno que podría liderar el socialista Pedro Sánchez a partir de la semana próxima.

Ciencia y financiación

Unidas Podemos y PSOE plasman también en ocho puntos el compromiso de ambos partidos con la Ciencia y la inversión en I+D+i. En este sentido, apuestan, en primer lugar, por aumentar la inversión pública en este capítulo por encima del incremento del gasto no financiero del Estado, avanzando hacia los objetivos comunitarios de inversión total pública y privada.

Otro punto es facilitar la contratación de personal en los centros de investigación públicos, con el aumento de las partidas destinadas a contratos predoctorales y postdoctorales y reduciendo la temporalidad del profesorado y de los investigadores.

Asimismo, contemplan aprobar el Estatuto del personal docente investigador y avanzar en la estabilización del empleo en esta área a través de OPES.

De igual modo, abogan por el desarrollo de la Ley de Ciencia 14/2011 con el refuerzo de la transferencia de conocimientos y la simplificación del trabajo de los investigadores en los Organismos Públicos de Investigación, entre otros puntos.

Para finalizar, los partidos firmantes confían en aumentar los recursos destinados a proyectos de investigación potenciando también un carácter plurianual que permita aprovechar el talento y la continuidad del personal contratado para cada uno de ellos.

El acuerdo tampoco pasa por alto otra petición histórica, la necesidad de impulsar un nuevo sistema de financiación de las comunidades autónomas que resuelva las carencias, asimetrías y ambigüedades, cita textualmente el documento, del sistema actual. El objetivo, en este sentido, es impulsar un sistema que permita garantizar la solidaridad entre los territorios y la igualdad entre los españoles, pero también asegurar la distribución justa de los recursos públicos y la capacidad de las comunidades autónomas para proporcionar los servicios y prestaciones de su competencia, como es el caso de la atención sanitaria.

Prevenir el suicidio se mantiene en la agenda

La actualización de la Estrategia de Salud Mental, impulsada por el actual equipo de María Luisa Carcedo, también tiene un espacio claro en este acuerdo programático. En particular, el documento subraya que se prestará una especial atención al diseño y desarrollo de una estrategia de prevención de la conducta suicida, que incluya un protocolo especial de actuación y que prevea la puesta en marcha de un teléfono de atención público, entre otras medidas. Todo ello, remarcan, en colaboración con las comunidades autónomas. La implementación del Marco Estratégico de Atención Primaria, otra de las actuaciones estrella del actual equipo, será prioritario si el nuevo gobierno sale adelante.