José A. Rodríguez Barcelona | viernes, 31 de marzo de 2017 h |

Assumpta Escarp critica la política desprivatizadora del consejero Comín por su falta de “planificación” y que el actual Gobierno catalán sitúe la celebración del referéndum sobre la independencia como un “bien superior” que impide abordar problemas como la falta de recursos en AP.

Pregunta. Esta legislatura está enfocada a la celebración del referéndum sobre la independencia de Cataluña. ¿Cree que este eje tan primordial está afectando la búsqueda de soluciones para los problemas de la sanidad catalana?

Respuesta. Creo que al menos de forma indirecta está pasando factura. El referéndum se ha colocado como un “bien superior”, como un objetivo que pasa por encima de todo. Es lo que siempre le digo al consejero: si te marcas un horizonte de 18 meses, en el ámbito sanitario estás perdido. El mundo sanitario quiere poco ruido y estabilidad. Además, los 18 meses de la hoja de ruta para lograr la independencia acabaron hace unos días.

P. Montserrat Candini, portavoz de Juntos por el Sí en la Comisión de Salud, decía en estas páginas la semana pasada que la solución más inmediata para subir los sueldos a los profesionales pasa por la creación de un “nuevo Estado”.

R. Sí, según ellos todo mejoraría con la independencia. Pero nunca nos han explicado cómo mejoraría. Entiendo que cuando uno tiene un ideal de este tipo se escuche tanto que se arreglará todo. Pero no sabemos cómo quedarán las balanzas fiscales o las pensiones, cómo se pagará un ejército…. Por otro lado, es improbable que Cataluña quede dentro de la Unión Europea, y esto puede comportar problemas de movilidad para los profesionales. Precisamente, acabamos de conocer un informe del Colegio de Médicos de Barcelona que alerta sobre la precariedad del colectivo médico. Es verdad que, cuando los profesionales acaban el MIR tienen trabajo, prácticamente no hay paro, pero muchos tienen contratos de semanas o meses. La inestabilidad entre los profesionales menores de 45 años es brutal.

Entonces, no vale hablar sólo de independencia. Para hacer un plan estratégico para la atención primaria o un plan nacional de Urgencias no necesitas la independencia. Puedes revertir de verdad los recortes, pero con la estelada lo tapan todo.

P. ¿Cómo se posiciona el PSC ante el afán desprivatizador del consejero Comín, que incluso llegó a anunciar una oferta de compra del Hospital General de Cataluña por parte del Gobierno catalán?

R. El consejero ha querido hacer entrar en crisis al sistema. Yo estoy a favor de la sanidad pública, no de la derivación. Pero el consejero ha querido hacerlo todo a la vez. Por ejemplo, ya ha derivado más gente que durante todo el año anterior al Hospital General de Cataluña, porque tenía un problema en el Parc Taulí. Si tú no tienes el Taulí arreglado, es complicado que la desprivatización funcione. Comín hace grandes anuncios, pero le falta planificación.

P. ¿Cree que los presupuestos de este año, anunciados por el consejero como que revierten en un “37 por ciento los recortes en salud”, pueden mejorar las listas de espera o las urgencias?

R. Esto lo dicen porque aportan 408 millones más respecto al presupuesto inicial del 2015, pero no presupuestan todo lo que la Generalitat gasta en Farmacia ni en dispensación hospitalaria. Aportan 400 millones más, pero no cuentan el déficit que se generará.

P. ¿Cuáles son las medidas que, según su partido, habría que poner en marcha para reducir listas de espera?

R. Hay que hacer una buena planificación, revertir recortes y aportar más recursos y personal en los diferentes peldaños. Por ejemplo, en el Instituto Catalán de Salud, entre el año 2010 y el 2015, se han suprimido 4.800 plazas de profesionales. Es necesario dotar de más personal a la atención primaria, abrir quirófanos a otras horas, tener más especialistas… Es un abordaje en cadena y de forma programada. Hay que tener en cuenta que se han perdido más de mil médicos en la atención primaria.