El pasado mes de enero, el Gobierno presentó el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, por el que nuestro país prevé recibir 70.000 millones de euros por parte de Europa entre 2021 y 2023 para paliar los efectos económicos de la pandemia. Pero no fue hasta el pasado viernes, 30 de abril, que España envió a Bruselas en Plan ultimado.

Como ya anunció en febrero Carolina Darias, ministra de Sanidad, la hoja de ruta del Ministerio tras la marcha de Salvador Illa sería la priorización de algunos hitos a conseguir en los próximos años. Así, las nuevas reformas e inversiones señaladas en el Plan de Recuperación suponen “una verdadera transformación del sistema sanitario español“. Entre ellas, destacan:

Formación del personal sanitario

A través del Plan de Recuperación, el Gobierno pretende reforzar las capacidades y competencias de los profesionales de la sanidad, con especial atención a la formación vinculada a las reformas e inversiones de este Componente. Asimismo, planea promover herramientas que permitan a los profesionales sanitarios compartir conocimiento para mejorar la coordinación y calidad de la atención sanitaria.

La inversión se despliega en cuatro ámbitos: formación continuada; recertificación de competencias; herramientas colaborativas para atender a los pacientes de alta complejidad; y elaboración de un mapa informatizado para visualizar recursos compartidos y prestaciones de la atención temprana en España.

Respecto a los planes de formación continuada de profesionales sanitarios, el Gobierno invertirá en incluir acciones formativas. La formación deberá ofrecerse por entidades acreditadas y las acciones formativas deberán versar, entre otros, sobre los siguientes ámbitos:

  • Utilización de tecnologías sanitarias y sistemas de información
  • Vigilancia de la salud pública y epidemiología.
  • Seguridad del paciente y profesionales
  • Uso racional de los recursos diagnósticos y terapéuticos
  • Detección precoz del cáncer
  • Salud Mental
  • Salud ambiental
  • Prevención de factores de riesgo
  • Detección precoz de violencia de género
  • Detección precoz del maltrato infantil
  • Bioética
  • Comunicación clínica
  • Medicina basada en la evidencia
  • Trabajo en equipo
  • Metodología de la investigación
  • Desarrollo de las competencias directivas de los responsables de los centros sanitarios
  • Formación de tutores de la formación sanitaria especializada

De acuerdo con estas prioridades, las CC.AA. presentarán al Ministerio de Sanidad sus planes específicos de formación continuada para poder recibir la financiación correspondiente. El Plan de Recuperación señala que las comunidades deberán justificar que las acciones incluidas en el plan no formaban parte con anterioridad de los planes regionales.

Los planes regionales serán analizados en la Comisión de Formación Continuada, mientras la aprobación de los criterios de reparto y la asignación de fondos corresponderá a la Comisión de Recursos Humanos del SNS. En total, la formación continuada contará con un presupuesto de 10.000.000 euros.

Data Lake sanitario

Anualmente el SNS atiende 234 millones de consultas médicas de Atención Primaria, 83 millones de consultas hospitalarias, 4 millones de ingresos hospitalarios y 23 millones de urgencias. Asociadas a estos servicios existe una amplia variedad de pruebas diagnósticas y de prescripciones que deben ser almacenadas con un doble propósito: “constituir la historia médica del paciente, asegurando la continuidad asistencial del sistema; y, debidamente anonimizadas o seudonimizadas, permitir este análisis masivo que se pretende cubrir con esta inversión”.

Por ello, el Gobierno propone generar un Data Lake (centro de datos) sanitario, que recoja la información de los sistemas de información para proporcionar un análisis masivo con capacidad de respuesta en tiempo real para la identificación y mejora del diagnóstico y tratamiento, identificación de factores de riesgo, análisis de tendencias, identificación de patrones o predicción de situaciones de riesgo sanitario. Para su creación, se destinarán 100.000.000 euros entre los años 2021 y 2023.

La intención de este Data Lake es proporcionar recursos que faciliten el desarrollo e implantación de proyectos de procesamiento masivo de datos por parte de las CC.AA, el Ministerio de Sanidad, centros y unidades de investigación u organizaciones del sector privado del sector de la salud.

Prevención de enfermedades y promoción de la salud

La pandemia ha causado serios estragos en la salud de la población, por lo que el Plan de Recuperación reforzará la capacidad preventiva y de promoción de la salud para evitar la aparición de enfermedades.

Se centra especialmente en la promoción de estilos de vida y entornos saludables, ámbito en el que se destinará un total de 62.050.000 euros. Esta inversión se despliega en siete ámbitos diferenciados:

  • Lucha contra el tabaquismo (7.000.000 euros).
  • Prevención del consumo de alcohol (2.000.000 euros).
  • Promoción de entornos y estilos de vida saludable (19.400.000).
  • Actuaciones del Plan de resistencia a los antibióticos (5.400.000 euros).
  • Subvenciones en materia de prevención y tratamiento de adicciones (8.700.000 euros).
  • Prevención de problemas de salud mental y promoción del bienestar emocional (2.550.000 euros).
  • Programas de prevención del cáncer (17.000.000 euros).

Respuesta ante futuras crisis sanitarias

“Una de las principales enseñanzas a extraer de la pandemia de COVID-19 es la necesidad de fortalecer las capacidades de vigilancia, detección precoz y respuesta rápida ante la eventualidad de cualquier situación crítica”, apunta el Gobierno en el Plan de Recuperación.

Además, requiere reforzar las capacidades de laboratorios y de instituciones sanitarias, cuyas debilidades se han puesto en evidencia con la pandemia y solventarlas es determinante para una mejor respuesta en el futuro.

Por tanto, se invertirán 9.450.000 euros en equipamiento tecnológico del nuevo Centro Estatal de Salud Pública; 27.400.000 euros en el nuevo sistema de Información de la Red Vigilancia en Salud Pública; 3.880.000 euros en el aumento de capacidad del laboratorio de ensayo de Equipos de Protección Individual (EPI) del Centro Nacional de Medios de Protección; o 1.740.000 euros en inversiones tecnológicas en la Agencia del Medicamento y la Organización Nacional de Trasplantes, entre otros ámbitos.

Inversión en equipos de alta tecnología

El Gobierno también plantea una inversión para los equipos de alta tecnología médica, ya que son un instrumento esencial en los procesos asistenciales. Así, se destinarán 792.100.000 euros en equipos médicos que incorporen la tecnología más avanzada permiten incrementar la supervivencia global y la calidad de vida mediante el diagnóstico de enfermedades en estadios tempranos, posibilitando la intervención terapéutica rápida y mejorando la calidad asistencial y la seguridad del paciente y del profesional al incorporar equipos más seguros.

Los objetivos que se persiguen son:

  1. Renovar los equipos que presentan un nivel de obsolescencia, ajustada por intensidad de uso, superior a las recomendaciones establecidas.
  2. Mejorar en la equidad en el acceso a la tecnología sanitaria por parte de los pacientes en el SNS, reduciendo las desigualdades territoriales y nivelando el acceso de los ciudadanos.
  3. Aproximar de forma progresiva al SNS a la media europea en términos de densidad de equipos de alta tecnología.
  4. Incrementar la seguridad del paciente y de los profesionales, ya que las nuevas tecnologías no sólo permiten diagnósticos más precisos y tratamientos más eficaces, sino que también reducen el nivel de radiación.

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