España utilizará los test de diagnóstico rápido como mecanismo de cribado ágil que permita aumentar “de forma inmediata”, entre un 40 y un 60 por ciento, la capacidad de hacer PCR de forma diaria. Así lo ha asegurado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, durante su tercera comparecencia ante la Comisión de Sanidad del Congreso, la segunda para actualizar la información relativa a la infección por Covid-19.

Este uso podría ir vinculado a un tercero. “Muy probablemente”, según Illa, se podrán utilizar “para un test de inmunidad”, en una fase de desescalada de la enfermedad que Sanidad está estudiando. El ministro ha insistido en la precaución: este uso todavía se tiene que verificar.

Salvador Illa ha comparecido por tercera vez en la Cámara baja.

Lo que es claro es que, una vez confirmado que España ha llegado a la curva epidémica e iniciado una fase de ralentización en los contagios, el objetivo del Ministerio ha pasado a ser el de aumentar al máximo la realización de pruebas diagnósticas. Esto incluye aumentar al máximo la realización de PCR y test rápidos.

La fabricación de PCR es suficiente

“Tenemos la convicción de que lo mejor ahora es hacer el máximo número de test posibles a las personas que tengan síntomas. Ya hacemos de 15.000 a 20.000 diarios, pero pensamos que para una eficaz estrategia hay que aumentar esta capacidad”, ha destacado Illa.

En este sentido, en base a los informes emitidos por el Instituto de Salud Carlos III, se sabe que los test más fiables de todos los disponibles son los PCR. Según Illa, “tenemos una fabricación nacional suficiente”. El Carlos III, de hecho, sigue trabajando para activar la producción nacional de PCR con cuatro empresas homologadas desde enero, a las que próximamente podrían sumarse tres más, si pasan los procesos de homologación.

El problema para aumentar la cantidad de test diarios que ahora se hacen es otro. “El cuello de botella”, ha dicho Salvador Illa, está en los kits de extracción. Sanidad ya se ha puesto manos a la obra y trabaja en varias vías con empresas nacionales para conseguir también la fabricación de estos kit de extracción, necesarios para aumentar el número de PCR diarios que se realizan.

Test rápidos

En relación a los kits rápidos, el Instituto de Salud Carlos III ha analizado más de 70 productos comercializados. El ministro ha explicado además que esta semana se ha recibido un millón de ellos que tienen una sensibilidad del 80 por ciento a partir de que la persona lleve siete o más días infectada. En pacientes que acaban de iniciar síntomas la sensibilidad es del 64 por ciento.

El ministro ha recordado, además que, según el Carlos III, estos test son un complemento adecuado para los PCR en acciones de cribado rápido en entornos con prevalencia alta de enfermedad y con altas posibilidades de contagio, como hospitales o residencias de mayores. “Los test rápidos detectan una parte importante de positivos pero aquellos que den negativo requieren de una PCR para descartar un falso negativo”, ha aclarado el ministro.

Salvador Illa durante su comparecencia en el Congreso.

Es por ello que Sanidad quiere acordar el ‘manual de uso’  de los test rápidos con las comunidades autónomas. Para ello no cuenta solo con el criterio de los expertos del Carlos III. “Ningún otro país —ha dicho Illa— los está utilizando de manera distinta”. Además, España también está pendiente de lo que puedan decir al respecto las autoridades europeas, en concreto el Centro Europeo para la Prevención de Enfermedades, que ha creado un grupo de trabajo expresamente dirigido a examinar la forma más eficiente de utilizarlos.

Toda la evidencia recabada será elevada a la Ponencia de alertas para concretar el uso de los test rápidos en el SNS. El ministro tenía pensado convocarla horas después de su comparecencia.

Escenarios futuros

Muchas han sido las preguntas que los grupos de la oposición han lanzado al ministro. Entre ellas, la de qué escenarios futuros se manejan. Illa confirmó que hay varios en estudio, pero que resulta prematuro anticiparlos. En todo caso, lo que sí ha declarado es que los expertos ya están intentando dilucidar cómo se podrá llevar a cabo el desescalado de las medidas, cuando llegue la hora… Una tarea extremadamente difícil por un motivo obvio: hay muy pocos precedentes en los que apoyarse.

Algunos diputados también han querido saber si sería posible trasladar pacientes  entre comunidades autónomas, para aliviar así la carga de los hospitales más afectados. El ministro ha asegurado que hay comunidades autónomas que ya se han ofrecido a acoger pacientes y que la posibilidad no está descartada. Es más, ha confirmado que el dispositivo de traslado “ya está preparado”, en caso de que fuera necesario recurrir a él. Sanidad cree que ese momento aún no ha llegado. Y añade que, en todo caso, la decisión se tomará siempre “pensando en lo mejor para el paciente”.

Cayetana Álvarez de Toledo y Concepción Gamarra durante la Comisión de Sanidad.

Investigación

El ministro ha finalizado su comparecencia con una mención especial a la investigación, “el horizonte que nos llevará hasta el final del túnel”, según sus palabras. Sanidad, ha recordado Illa, trabaja en varias líneas para favorecer y apoyar una investigación acelerada que permita aplicar el resultado de las investigaciones en curso a los pacientes de forma urgente.

Así, desde la Aemps, ha dicho, se trabaja a nivel nacional e internacional en la investigación de medicamentos, tanto nuevos como ya aprobados para otros usos, que pueden ser eficaces en distintas fases de la infección. A día de hoy se han aprobado 13 ensayos clínicos y se están valorando 98 solicitudes.

El ministro se ha detenido en dos. Una aprobada esta semana, y que está promovida por el Ministerio de Sanidad —en concreto desde el Plan Nacional del Sida— y que evaluará la eficacia para prevenir el contagio del coronavirus con medicamentos antirretrovirales que se emplean para el tratamiento del VIH. En segundo lugar, ha destacado la “importante participación de España” en el estudio Solidaridad, promovido por la OMS. Empezó el 1 de abril y participan 40 hospitales de 9 comunidades autónomas.

El ministro también ha destacado la vía de colaboración con el Ministerio de Ciencia, a través del Carlos III, para fomentar, coordinar y financiar urgentemente la investigación de nuevas formas de tratamiento que surgen de la comunidad científica. En última semana, ha recordado Salvador Illa, se han financiado dos nuevos proyectos que buscan encontrar un tratamiento en fases precoces para evitar que los pacientes empeoren y requieran ventilación mecánica. También se ha referido al “esperanzador” estudio para medir la eficacia y seguridad de tratar a los pacientes con plasma obtenido de pacientes que han superado la enfermedad.