El pasado 28-M tuvieron lugar las elecciones en hasta 12 comunidades autónomas de España, entre ellas Extremadura. El resultado en la región fue muy ajustado, con 28 escaños para cada una de las formaciones mayoritarias, PSOE y PP. Sin embargo, en la suma hasta los 65 totales que componen el Parlamento extremeño, los populares tomaban teórica ventaja por un único concejal si los votos de investidura de VOX lo favorecieran respecto a socialistas y Podemos.
En este escenario, se ha producido ya la segunda reunión entre el Partido Popular y VOX para la negociación y el acuerdo de gobernabilidad en Extremadura. Durante la reunión se ha abordado la negociación de un documento con un acuerdo programático que, como comunican los populares, no ha sido aceptado por la segunda formación.
Dentro del mismo, se plantea que VOX asuma presidencia de la Asamblea regional, pero sin entrar en el Ejecutivo autonómico. Dentro de la batería de medidas abordadas por el documento, se explicita un “Pacto por una Sanidad digna para todos los extremeños”. Como se puede leer, se apuesta por desarrollar “un Plan Estratégico de lucha contra las listas de espera”, así como la puesta en marcha de una lista de espera única y voluntaria, y la aprobación de un nuevo marco de atención primaria.
Un Plan Estratégico de lucha contra las listas de espera y la aprobación de un nuevo marco de AP, entre las medidas que figuran en el documento de gobernabilidad
“Necesitamos más médicos, y por ello, activaremos fórmulas que atraigan a los profesionales sanitarios a nuestra región, con especial atención a los pueblos, con el objeto de dotar de servicios públicos básicos al medio rural”, profundiza el texto dado a conocer, que de rubricarse haría que la candidata del PP, María Guardiola, sucediera a Guillermo Fernández Vara al frente de la Junta. Al mismo tiempo, ello también haría que su partido retuviera la Consejería de Sanidad, hasta la fecha en manos del socialista José María Vergeles.
Réplica de VOX
Desde el partido que a nivel nacional preside Santiago Abascal explican que, pese a existir muchas coincidencias en las medidas programáticas aportadas por el Partido Popular, «el PP se cierra rotundamente a hablar siquiera de la posibilidad de que VOX entre en el futuro gobierno, quedando excluido VOX del equipo de Gobierno una vez conformado el mismo». En este punto, la formación ha instado al PP a seguir hablando de un programa de alternativa política al socialismo y de la conformación del futuro gobierno, «para asegurar la presencia de VOX en la toma de decisiones que den cumplimiento al acuerdo programático que se cierre».
Como parte de su comunicación, el partido adjunta también las propuestas que ha llevado a la mesa de negociación con los populares, en las cuales no aparece referencia explícita a la sanidad. Si bien desde VOX se abunda en que se continuará «con la mano tendida hasta el último momento» para conformar gobierno, precisan que «la marcada línea roja del Partido Popular, de no seguir hablando de la conformación del Gobierno», denota «indiferencia indiferencia del PP a regalar la Asamblea al Partido Socialista».
