CARMEN M. LÓPEZ Madrid | viernes, 09 de marzo de 2018 h |

Mejorar la situación laboral de los profesionales del Sistema Nacional de Salud se ha convertido en un desafío para todas las esferas sanitarias. El Congreso, el propio Ministerio, los sindicatos, las comunidades autónomas… En definitiva todos están tratando de buscar soluciones a este problema que podría ir en auge.

El Senado acogió la semana pasada una moción del PSOE para instar al Gobierno a abordar un Plan Estratégico para la cobertura de médicos, enfermeros y otras profesiones con el fin de asegurar las necesidades del SNS. Una iniciativa que quedó rechazada por 145 votos en contra, pero que recibió varias enmiendas de adición. Un indicador de que el tema preocupa.

Como defendió el portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad del Senado, José Martínez Olmos, “es imprescindible dotar al SNS, por parte del Ministerio de Sanidad, de una herramienta de planificación que permita definir y anticiparse, de manera sistemática, con las comunidades autónomas y con las organizaciones profesionales, a las necesidades, tanto en números globales de profesionales que puedan ser necesarios en el futuro, como en números particulares de alguna especialidad específica que pueden tener dificultades para ser cubiertas”. Esta necesidad se materializaría, a su juicio, en una estrategia nacional.

El foco de esta moción está en la formación. “Es importante que las universidades públicas puedan responder a los requerimientos del sistema sanitario”, apuntó. Además, se debería también abordar las carencias de profesionales, el déficit de cobertura de algunas especialidades en concreto, las previsiones de futuras jubilaciones, así como la cobertura de nuevas necesidades docentes para formar a los especialistas y la agilización de los procedimientos de acreditación y homologación de títulos.

Como añadió la senadora de Coalición Canaria, María del Mar Julios, el SNS está en una “nueva situación de desequilibrio entre la oferta y la demanda en la profesión sanitaria”. Este es, en su opinión, un problema cíclico. Hace años, el stock médico —con amplias bolsas de paro— era considerable, junto con unas reducidas plazas MIR conllevó a tomar la decisión de adoptar unos fuertes numerus clausus. Tras esto, se abrió el MIR y aparecieron nuevas especialidades, como la de medicina familiar. “¿Qué ocurre paralelamente? Se aprueba, la Ley General de Sanidad, la puesta en marcha de plazas en el nuevo modelo de atención primaria y una contratación masiva de profesionales sanitarios”, apuntó Julios.

Ahora, tras la crisis económica, en la que se han congelado las contrataciones, las oposiciones, la tasa de reposición, hay alrededor 7.000 profesionales médicos en el limbo porque salen de la facultad pero no pueden acceder al MIR.

Si bien, este asunto de la equiparación de plazas resulta importante para la portavoz de Podemos, Concepción Palencia, la estrategia se debe centrar también en la modificación de del Estatuto marco del personal estatutario, al objeto de dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, en el sentido de que las necesidades de carácter permanente sean cubiertas con puestos o plazas de carácter estructural. Esta fue, precisamente, una de las enmiendas que el PSOE rechazó, ya que, en opinión de Martínez Olmos, no es el momento de abordar este asunto.

Por su parte, desde el PP, Alfonso Jesús Rodríguez Hevia, recordó que el Consejo Interterritorial ya trabaja en el déficit de especialistas. Si bien, defendió otra enmienda en la que insta al Gobierno a que, “en el marco de un acuerdo del Cisns, aborde de forma urgente, la puesta en práctica de las medidas consensuadas por el grupo de trabajo que sean ratificadas en el Consejo Interterritorial”.

Martínez Olmos explicó que no era motivo para debatir la toma de decisiones en el Cisns. “Saben que mantenemos una profunda discrepancia con el reglamento, pero, en relación con el debate sobre la necesidad de profesionales, una cosa no tiene que ver con otra”, remarcó el socialista, al tiempo que le adelantó su rechazo pues esta enmienda “no resuelve el problema”.


Formación



“Es importante que las universidades públicas puedan responder a los requerimientos del SNS”



Especialidades



La iniciativa trataba de superar el déficit de cobertura de algunas especialidades para las que no hay relevo