La sanidad española ha llamado la atención de los países de Oriente Medio y el Norte de África. Instituciones de Bahréin, Irak, Jordania, Palestina y Marruecos coincidieron durante Fitur Salud en la necesidad de tender puentes que permitan el acceso del turista sanitario. “España no está aprovechando su oportunidad”, subrayó Mohamed Sulail, director médico de Gramco Company, una compañía radicada en Bahréin.
Sulail subrayó que la situación geográfica, la calidad de su sistema sanitario y la atracción de turistas de ocio son factores “que deberían hacer de España un destino favorable y no se entiende por qué no lo es en la actualidad”. Una de las causas que podría contribuir a la explosión del mercado español es las acreditación de sus centros sanitarios. Mohaned Alsaadi, consejero delegado de Dar’al Mohaned Company, de Irak, expuso que a la ahora de orientar a sus pacientes “no cuentan con mucha información de los hospitales españoles”. Entre sus requerimientos se encuentra precisamente acreditaciones que garanticen la calidad, además de la publicación del coste de los tratamientos y otros servicios de apoyo. “Sabemos que la información sobre los precios es secreta debido a la competencia, pero al menos podrían proporcionar costes estimados”, explicó Alsaadi.
Tanto el Norte de África como Oriente Medio suponen una oportunidad de negocio. Sulail puso de manifiesto que las estimaciones sitúan en 2020 el mercado de salud en 144.000 millones de dólares (alrededor de 117.360 millones de euros). Solo los países del Golfo Pérsico destinaron a salud unos 40.000 millones de dólares (32.600 millones de euros).
Existen en estos países del Golfo dos perfiles de pacientes. Las familias reales comenzaron a solicitar asistencia médica en otros países en los años 50. India y Egipto eran sus primeros destinos. Poco a poco la tendencia se dirigió a Reino Unido y en la actualidad Alemania es hoy el más demandado. Otros países como Estados Unidos y Suiza. En los 70 los ciudadanos de clase media y alta de estos países comenzaron a recibir asistencia sanitaria en otros países, aunque han tomado rutas diferentes. En su mayoría acuden al Este de Europa, Jordania y especialmente Turquía.
España no se encuentra hoy entre los destinos más solicitados de los países del Golfo, a pesar de las ventajas estratégicas que presenta. Sulail destacó entre ellas su estatus como tercer país más visitado del mundo, la calidad de la asistencia, cirugía de primer nivel, los expertos más avanzados en el tratamiento de la infertilidad, el reconocimiento como el séptimo mejor sistema sanitario del mundo según la Organización Mundial de la Salud, las excelentes infraestructuras turísticas y la experiencia y calidad de sus profesionales sanitarios.
Pacientes africanos
El continente africano también muestra un importante flujo de pacientes pero la mayoría de ellos busca la solución dentro de sus continentes. Marruecos, Suráfrica, Egipto y Túnez son los destinos más demandados.
Sin embargo instituciones de este país como Health 4 You han puesto sus ojos en la sanidad española y en otros países europeos. El socio director de esta empresa, Achraf Sokari, subrayó que España, Reino Unido y Francia presentan una serie de ventajas: son relativamente más baratos que Estados Unidos, los lazos que existen entre estos países y las antiguas colonias y la ausencia de barreras de lenguaje. Sin embargo, Marruecos cuenta con una serie de puntos a su favor en comparación con estos estados europeos. En primer lugar, el precio, y en segundo lugar, la facilidad para la obtención de visados. En este último punto también se ha visto favorecida Turquía, que tiene además un gran número de hospitales acreditados.
Pero el precio no siempre es un problema. En el caso de los países del Golfo, Sulail manifestó que sus pacientes se fijan en otras cuestiones como “los servicios y las infraestructuras sanitarias”. Los ponentes coincidieron en que España necesita una estrategia a largo plazo para extraer beneficios de este turismo sanitario. “Los planes de los hospitales españoles son a corto plazo”, manifestó Alsaadi.
Entre los servicios más solicitados por los pacientes africanos se encuentran en la actualidad los tratamientos de reproducción asistida, oncología, neurocirugía, enfermedades cardiovasculares, ortopedia, oftalmología, urología, trasplantes de hígado y riñón, pérdida de peso, dentistas y pruebas diagnósticas de diferente tipo.