Catalina García, consejera de Salud y Consumo de Andalucía, ha apuntado en dirección al ministerio con respecto al que considera el gran problema de la sanidad española: el déficit de profesionales sanitarios. Tal y como ha destacado la responsable en un desayuno informativo organizado por Europa Press, la ‘pelota’ estaría, en su opinión, sobre el tejado del departamento que dirige Carolina Darias: “Todas las CC. AA. hacemos bien los deberes”, ha defendido. Como ha recordado, vienen demandando “de manera reiterada” la celebración de un Consejo Interterritorial monográfico sobre este asunto.

Del análisis de situación descrito por García han subyacido dos ideas fundamentales sobre las que cimentar la reversión del momento actual: la necesidad de asumir un cambio de modelo del sistema, unida a la de articular un gran Pacto de Estado por la Sanidad para consensuar acuerdos amplios y lograr “salarios dignos” para el capital humano.

Del mismo modo, ha hecho hincapié en los cerca de 4.000 personas examinadas que este presente año no se van a poder especializar en un escenario en el que actual “no hay más profesionales”. “Pedimos que se parara la convocatoria y se aumentara el número de plazas MIR”, ha enfatizado la también diplomada en Enfermería. Asimismo, ha apreciado la acreditación de unidades de formación docentes como el segundo gran desafío: “Es necesario flexibilizar los criterios”.

Respecto al trabajo para mejorar la situación en su comunidad, la responsable de Salud y Consumo ha sacado pecho por lo realizado a lo largo de cuatro años al frente de la Junta, extendidos sobre la legislatura anterior. “Hemos alcanzado dos acuerdos en Mesa Sectorial que han supuesto un aumento del 14 por ciento en los profesionales de la sanidad andaluza”, ha remarcado.

García ha sacado a colación el reciente acuerdo logrado con el Sindicato de Médicos de Andalucía a razón de la situación. “Comprendemos las legítimas protestas que se están produciendo, pero el déficit de médicos es un problema de todas las CC. AA. en el que el ministerio tiene especial responsabilidad”, ha reconocido, exigiendo que este cumpla con sus competencias.

Salud mental: preocupación y prioridad

En su exposición, la consejera andaluza ha calificado la salud mental como un tema preocupante por su creciente incidencia por la pandemia en diferentes edades, haciendo mención específica a mayores y, sobre todo, población juvenil. “El aislamiento social, la incertidumbre económica, el cierre de escuelas y la pérdida de seres queridos han contribuido a un aumento en el estrés y la ansiedad. Esto, a su vez, ha llevado a un aumento en los casos de depresión y, en algunos casos, el suicidio”, ha lamentado.

A este respecto, ha señalado la necesidad de “mover ficha entre todos”, rescatando el trabajo realizado desde su departamento con la llegada de más recursos humanos (aumento de psicólogo en atención primaria) para su abordaje o la puesta en marcha de dos unidades para trastornos de conducta alimentaria, cuyos casos han crecido “de manera exponencial.

“Sabemos que el debut del mayor número de trastornos mentales se produce alrededor de los 14 años”

Catalina García, consejera de Salud y Consumo de Andalucía

García ha puesta su foco en el trabajo que desde el aspecto estratégico se dedica en el apartado de la prevención. “Vamos a hacer programas formativos de la comunidad educativa para hacer una detección precoz. Sabemos que el debut del mayor número de trastornos mentales se produce alrededor de los 14 años”, ha avanzado.


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