La Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital General de Elche ha desarrollado “extraordinariamente” las alternativas a la hospitalización convencional, como el hospital de día y las consultas de alta resolución, para atender todos los procesos infecciosos agudos, sistémicos y órgano- específicos, tanto adquiridos en la comunidad como en el entorno sanitario, tal y como explica a GM Mar Masiá, jefa de esta sección.
Además, disponen de un programa de control de calidad con varias vías clínicas para la atención de los procesos más frecuentes y de mayor complejidad.
La asistencia se integra con la docencia de pre y postgrado y con una activa investigación clínica, epidemiológica y evaluativa. La unidad colabora también con diferentes grupos cooperativos nacionales de estudio e investigación en enfermedades infecciosas y en los últimos años ha participado en numerosos proyectos nacionales e internacionales de investigación de VIH/Sida. De hecho, está integrado como Grupo de Investigación ‘Core’ de la Red Nacional Temática Cooperativa de Investigación en Sida desde 2003.
Entre las peculiaridades de esta unidad, Masiá destaca su apertura a la comunidad gracias a su hospital de día, en el que se atienden a demanda las infecciones agudas más frecuentes adquiridas a nivel comunitario, que hasta el momento solo podían ser manejadas mediante ingreso hospitalario. “Esto permite la gestión de los pacientes con los mismos medios que cuando ingresan en el hospital, con las mismas herramientas diagnósticas y terapéuticas, pero en régimen ambulatorio”, subraya.
Otro de los factores que apoyan su enfoque comunitario es que dispone de un Centro de Vacunación Internacional y Salud Internacional en el que se presta atención integral a los viajeros y se atiende a pacientes inmigrantes que acuden por patologías adquiridas en sus países de origen. La unidad también desarrolla “una intensa actividad de investigación” que integra con la asistencia y la prevención, y para ello cuenta con un laboratorio de investigación, un laboratorio de exploración vascular y otro de anoscopia de alta resolución.
Una parte importante de la actividad asistencial comprende la atención, bien en régimen ambulatorio o mediante hospitalización convencional, de la patología infecciosa comunitaria más frecuente, como la neumonía, la infección del tracto genitourinario o la infección de piel y partes blandas. La asistencia incluye también la patología infecciosa de origen hospitalario.
Otra actividad central de la unidad es el tratamiento y seguimiento de pacientes infectados por el VIH y por los virus de la hepatitis B y C, así como de otras enfermedades de transmisión sexual, las enfermedades importadas y el screening y tratamiento de las infecciones en pacientes inmunodeprimidos, como los trasplantados o los que reciben biológicos.
La Unidad de Infecciosas está compuesta por la jefa de la misma, un profesor de la universidad y jefe de Nodo de la Red de Investigación en Sida —que coordina la docencia e investigación—, dos facultativos a tiempo completo, un facultativo a tiempo parcial, cuatro becarios contratados para investigación, dos enfermeros, dos auxiliares y una administrativa. La actividad incluye atención de personas hospitalizadas en planta, a enfermos programados en las consultas externas, atención urgente de pacientes ambulatorios que demandan los propios pacientes o el servicio de urgencias, interconsultas de otros especialistas o de AP y atención telefónica de consultas.
Otra faceta de la actividad se desarrolla en el hospital de día, en el que se realizan extracciones de sangre y diversos tipos de pruebas diagnósticas, como ecografía, test de Mantoux o toma de muestras y procesamiento para diversos estudios microbiológicos, y se administran tratamientos parenterales. La unidad también lidera la política de antibióticos del hospital.
Respecto a la gestión de los tratamientos, en el hospital de día se administran tratamientos orales y parenterales con antibióticos, antifúngicos o antivíricos de forma autónoma por los enfermeros adscritos a ella a pacientes ambulatorios y a ingresados cuando son dados de alta. Por lo tanto, no solo se evita un gran número de ingresos, sino que se puede acortar de forma significativa la duración de la estancia en el hospital. También hay una estrecha colaboración con el Servicio de Farmacia, que suministra “sin demora” a la unidad los fármacos solicitados y prepara, cuando es preciso, las infusiones que requieren medidas especiales de procesamiento.
La administración ambulatoria de tratamientos antimicrobianos por vía parenteral (primero en dosis diaria y recientemente en dosis única y/o administración semanal) ha supuesto “un importante avance a nivel asistencial”, ya que ha reducido significativamente el número de ingresos hospitalarios y ha permitido acortar la duración del ingreso, “con todas las ventajas que esto conlleva”, explica Masiá.
Por una parte, implica una mejora significativa en la calidad de vida de los pacientes y en su satisfacción con la atención recibida, ya que esta modalidad de tratamiento reduce “drásticamente” la interferencia con sus actividades cotidianas, permite seguir en su domicilio y potencialmente posibilita incluso la continuación de su actividad laboral. Por otra parte, evita algunas complicaciones asociadas con el ingreso hospitalario, como las infecciones nosocomiales. Otro aspecto importante es el ahorro económico que supone el manejo ambulatorio frente al régimen de ingreso.
Además, en este centro más de la mitad de los pacientes con los procesos infecciosos comunitarios más frecuentes son manejados y seguidos de forma ambulatoria con tratamiento parenteral u oral. Otros procesos que requieren tratamientos prolongados, durante varias semanas, y que pueden haber precisado inicialmente un ingreso hospitalario, como las endocarditis o las infecciones articulares o protésicas, pueden ser dados precozmente de alta y completar el tratamiento endovenoso en la Unidad de Enfermedades Infecciosas.
La unidad se caracteriza por estar abierta a la comunidad gracias a su hospital de día, en el que se atiende a demanda
No solo evitan un gran número de ingresos, sino que reducen significativamente el tiempo de estancia