Andalucía ya está trabajando en su nuevo Plan de Alzheimer y otras demencias. Así lo ha informado la Consejería de Salud y Familias, a través de la Dirección General de Cuidados Sociosanitarios, con motivo del Día Mundial del Alzheimer, que tiene lugar este martes. A su celebración se suma también la Junta de Andalucía “centrando sus esfuerzos en estos enfermos y sus familiares”, ejes del reciente Plan de Humanización del Sistema Sanitario Público de Andalucía.

El futuro Plan de Alzheimer estará alineado con el Plan de acción mundial sobre la respuesta de Salud Pública a la demencia 2017-2025 de la OMS, con el Plan Integral en Alzheimer y otras demencias 2017-2023 del Ministerio de Sanidad y con la propia Estrategia de Alzheimer de la región.

Con el avance de dicho Plan, la Consejería de Salud andaluza se une a pacientes familiares, cuidadores, profesionales sociosanitarios y agentes sociales para dar voz a las personas afectadas por esta enfermedad, en un marco de atención integrada centrada en la persona, que garantice la continuidad asistencial.

Ejes del Plan

El nuevo Plan verá la luz, previsiblemente, a principios del próximo 2022. Entre sus ejes principales destacan la sensibilización, concienciación hasta la normalización, prevención, potenciación del diagnóstico temprano, formación y asesoramiento tras el diagnóstico, atención social y sanitaria coordinada en torno a cada persona, apoyo a las personas cuidadoras familiares, fomento de la investigación biomédica, social y sanitaria, y mejora en los registros y sistemas de información.

El Alzheimer no solo afecta a personas mayores, sino también, y hasta en el 10 por ciento de los casos, a personas menores de 65 años. Pero la Consejería también extiende la mirada a otras enfermedades degenerativas que causan deterioro cognitivo grave, menos frecuentes o conocidas, pero que ocasionan en pacientes y familiares repercusiones y necesidades de cuidados similares a la enfermedad de Alzheimer.

Estas patologías ocasiones un impacto que “excede lo personal y familiar”. Y es que se convierten en todo un reto para sociedades y gobiernos a nivel mundial. Por ello, la Junta de Andalucía se marca como prioritario afianzar políticas sociosanitarias que respalden y hagan partícipe la labor de interlocución, de defensa y prestación de servicios de todos los agentes sociales implicados en la atención y cuidados de estos pacientes y sus familias, representados por la extensa y activa red andaluza de Asociaciones de Familiares.

Estrategia de Alzheimer

La colaboración entre todas las partes interesadas ha logrado resultados sociales tangibles, como el desarrollo de la Estrategia de Alzheimer dentro del convenio marco de colaboración entre la Consejería de Salud y Familias junto con la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación y la Confederación Andaluza de Asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzheimer y otras Demencias (ConFEAFA).

Desde el punto de vista asistencial, la Consejería ha impulsado en los últimos años la actualización del Proceso Asistencial Integrado (PAI) de Demencias. El documento recogerá en breve el consenso multidisciplinar basado en la evidencia alcanzado por un grupo de profesionales expertos tras la revisión sistemática de la documentación más actualizada disponible, permitiendo aplicar protocolos factibles en la práctica clínica diaria que garanticen el diagnóstico precoz, tratamiento integral, seguimiento continuo y cuidados más adecuados atendiendo a la fase de la enfermedad, así como a las decisiones y necesidades de pacientes y cuidadores.

Precisamente, la Consejería considera indispensable reforzar la ayuda a familiares y personas cuidadoras, atendiendo a su formación y posibilitando su descanso y bienestar emocional, previniendo y abordando la sobrecarga del cuidador. Y es que el 90 por ciento de las personas con Alzheimer residen en su domicilio, cuidado por sus familiares, lo que exige trabajar de forma coordinada para ofrecer la mejor atención social y sanitaria domiciliaria.

“Es crucial llegar hasta donde se encuentre el paciente, sea medio rural o urbano, para garantizar su acceso a los tratamientos farmacológicos y no farmacológicos, adecuados a cada etapa de la enfermedad, así como formación y asesoramiento de familiares y cuidadores”, apunta la Consejería de Salud.

Terapias asistidas

En estos dos últimos años, desde la Consejería de Salud y Familias y con la financiación a cargo de los fondos del Ministerio de Sanidad como apoyo a la implementación a la estrategia frente a enfermedades neurodegenerativas, se han dotado los recursos técnicos necesarios para extender el entrenamiento cognitivo a toda la población que lo requiriera independientemente de su lugar de residencia.

Llegado el momento o la decisión de institucionalización, desde la Junta de Andalucía se trabaja por dotar a los centros de día y residencias y a sus profesionales de todos los recursos necesarios para garantizar la máxima calidad de vida posible para nuestros mayores.

Plan de Humanización

Los pacientes con Alzheimer y otras demencias y sus familias constituyen un eje central del reciente Plan de Humanización del Sistema Sanitario Público de Andalucía, aprobado este año.

Desde este Plan se impulsará el desarrollo de estrategias que respeten la dignidad de las personas y sus derechos; que incorporen lo que realmente tiene valor para el paciente y sus familias, así como condiciones de trabajo adecuadas para sus profesionales; que fomenten la escucha y la participación, en un entorno confortable, y en un marco ético, de equidad y de excelencia en la atención.

Asimismo, en la senda de la mejora continua, el Gobierno andaluz está trabajando en la Estrategia Andaluza para la Coordinación Sociosanitaria y en un proyecto de decreto que regularán la atención sociosanitaria en Andalucía, para evitar la fragmentación de la respuesta social y sanitaria ante las necesidades de prevención, tratamiento y atención que presentan, entre otras, las personas con Alzheimer y otras demencias y sus familias, estableciendo la actuación coordinada de servicios y la convergencia de las estructuras sanitarias y sociales para ofrecer una respuesta temprana, adecuada y continuada.