Ya tenemos algunos modelos reales del impacto de la vacunación que los epidemiólogos están observando detenidamente. ¿Qué ocurre en una sociedad en la que la que un alto porcentaje de personas está vacunada contra la Covid-19? Israel, en la primera semana de febrero, habia administrado al 75% de su población con más de 60 años dos dosis de la vacuna RNAm de Pfizer/BioNTech.

Impacto en los hospitales

Ya tenemos algunas respuestas del impacto de la vacunación. El resultado inmediato es una reducción de un 60% de los ingresos hospitalarios en relación al pico de ingresos que Israel tuvo el mes anterior. Quien piense que es el comienzo del fin, se equivoca. La vacunación masiva es una manera de aliviar los sistemas sanitarios, aspecto esencial para no colapsar la atención médica.

Pero los contagios y los asintomáticos continúan diseminándose en una sociedad con una alta cobertura vacunal. Auqnue cada vacuna es distinta y aún no se sabe qué las diferencia con exactitud.

“La vacunación masiva es una manera de aliviar los sistemas sanitarios, aspecto esencial para no colapsar la atención médica”

Variantes con resistencia a las vacunas

La variante del SARS-CoV-2 B.1.1.7. originaria de Gran Bretaña también se extiende en Israel. Esta cepa es más contagiosa, como se ha publicado. La identificada en Sudáfrica ya es la predominante (B.1. 351) y la originaria de Brasil P.1. se extiende. Estas cepas arrojan dudas sobre cómo se afectará el proceso de vacunación y a la inmunidad que se pretende.

Eficacia de las vacunas

Todas las vacunas hasta ahora comercializadas son eficaces en prevenir casos graves de Covid-19 en un rango de entre un 85 y un 100%. Pero la eficacia disminuye en todos los casos de Covid-19 a un rango de entre el 65 y el 95%. Distintos protocolos de ensayos, distintas vacunas o distintas cepas de virus pueden estar detrás de esta horquilla tan amplia.

“Pero la duda razonable del impacto real de las vacunas en la pandemia no vendrá resuelta hasta dentro de unos meses”

Pero la duda razonable del impacto real de las vacunas en la pandemia no vendrá resuelta hasta dentro de unos meses. Deberemos observar qué eficacia tienen las vacunas en prevenir la infeccion asintomática y los contagios del coronavirus. Porque es necesario que sean las dos acciones conjuntas que se minimicen con las vacunas.

Lo relevante: impedir la transmisión del virus

El impacto en la epidemia de las vacunas se producirá cuando disminuyan la transmisión de la infección. Tardaremos meses en saber qué vacunas evitan la transmisión mejor que otras.

Un ejemplo ilustrativo (ver figura) lo explica The Economist. Una vacuna que prevenga la enfermedad, la Covid-19, pero no la transmisión, provocará un incremento de asintomáticos. El conjunto total de contagiados (asintomáticos y enfermos) se mantendrá.

“El conjunto total de contagiados (asintomáticos y enfermos) se mantendría”

Este tipo de vacunas no impiden que la pandemia continúe su curso, aunque sí evitan los casos graves.

El colapso hospitalario por los ingresos se ve aliviado, lo que no es poca cosa, pero la pandemia sigue avanzando y contagiando.

Por ello, no será posible reducir la presencia de mascarillas, distancia social, higiene de manos, etc.  Por supuesto, en las personas no vacunadas estará el problema porque los asintomáticos les contagiarán. Por tanto, no es tanto prevenir la enfermedad sino la transmisión.

Las vacunas de más éxito en prevenir tanto la infección como la enfermedad que ésta desarrolla son las que pueden reducir el número global de contagiados al tiempo que minimizan la Covid-19 (ver figura, a la derecha). Con las nuevas cepas apareciendo en apenas 12 meses de pandemia, quedan años de lucha, y muchas vacunas por venir. Sólo hasta que llegue una vacuna esterilizante, la que elimina el virus del ser humano, podremos penar en el comienzo del fin. Pero se antoja muy complicado, dicen los expertos.