Ricardo Campos, médico y ex secretario General de Sanidad | martes, 30 de abril de 2019 h |

Los ciudadanos y ciudadanas de toda España han sido los auténticos protagonistas de las elecciones generales celebradas el pasado día 28 de abril. El pueblo español ha demostrado con creces la madurez política que ha alcanzado. No se ha dejado influir, ni intimidar, por el enorme ruido producido, no sólo durante la campaña electoral, sino desde el mismo momento en que el socialista Pedro Sánchez, mediante una moción de censura, asumió la responsabilidad del gobierno de España.

Ese pueblo español que, de forma generalizada, ha sufrido en silencio y con unas enormes dosis de dignidad, todo tipo de recortes en sus derechos y que, en definitiva, ha sido la auténtica víctima de una crisis económica de la que no era en absoluto culpable.

Ante esa monumental muralla de ruido que ocultaba, exclusivamente, la ambición del poder y la carencia de propuestas, la ciudadanía ha sabido valorar las acciones de aquellos que realmente se preocupan por sus problemas, y que lo han demostrado en cuanto han tenido la oportunidad durante los últimos diez meses.

Uno de los derechos de ciudadanía que más ha sufrido los recortes durante los últimos años, ha sido la sanidad pública, y el liderazgo de esa recuperación de derechos lo ha ejercido el Partido Socialista.

Bajo la dirección de Carmen Montón, primero como Consellera de Sanidad en el gobierno valenciano de Ximo Puig y, posteriormente, como ministra en el gobierno de España de Pedro Sánchez, un equipo de profesionales comprometidos con la sanidad pública, ha recuperado derechos eliminados durante esos duros años de crisis, como son el derecho a la asistencia sanitaria para toda la ciudadanía y la eliminación del copago farmacéutico impuesto a un colectivo tan vulnerable como son los pensionistas. Asimismo, además, pusieron en marcha multitud de acciones en el ámbito sanitario para mejorar la vida de las personas, como tratar a todos los pacientes de Hepatitis C.

Como decía anteriormente, el pueblo español ha sabido abstraerse del ruido y confiar en el partido socialista como exponente español de la socialdemocracia, que ha demostrado que gobierna para acabar con la desigualdad y que, a buen seguro, con el respaldo mayoritario obtenido, va a seguir gobernando para las personas, creando una sociedad más justa, inclusiva e igualitaria.