El Plan Europeo contra el cáncer ha sido aprobado con el apoyo de más del 90% de los eurodiputados. Los dos grupos mayoritarios de la Eurocámara, Socialistas (S&D) y populares (EPP), aglutinan casi la mitad de los miembros distribuídos en 8 grupos parlamentarios. El contundente apoyo muestra que es posible trabajar a favor de la salud de los ciudadanos y ciudadanas desde distintos ámbitos ideológicos, al menos en Europa.

Las cifras del cáncer en la UE

Las cifras no dejan indiferente. Un total de 4.000 millones de euros de presupuesto, 12 millones de supervivientes en Europa, un 50% de crecimiento en la incidencia entre 2020 y 2040 y más de 2,5 millones de personas que serán diagnosticadas de cáncer en 2022 dentro de la UE.

La aprobación del Plan de la UE contra el cáncer ha sido ensalzada desde la presidenta de la comisión hasta los líderes de los principales grupos que la han impulsado.

Dolors Monserrat, eurodiputada del PPE y miembro del comité del Plan de cáncer de la UE.

Para la comisaria de salud, Stella Kyriakides, se trata de comenzar a luchar “de forma decidida contra el cáncer”. Reforzar la prevención y los tratamientos, acabar con las desigualdades y mejorar la investigación son los tres ejes que establece.

Para Dolors Montserrat, eurodiputada y portavoz del Grupo Popular Europeo (PPE), es un “hito histórico” que mejorará el acceso a los mejores tratamientos en el menor tiempo posible.

Desde el grupo Socialistas y Demócratas (S&D), Sara Cerdas destaca su agradecimiento a “todos los que han contribuido a un informe sólido” basado en la mejor evidencia científica para prevenir, diagnosticar antes, facilitar la accesibilidad a los tratamientos y a la mejor calidad de vida. Para el eurodiputado Nicolás González (S&D) los 100 millones de diagnósticos no realizados durante la pandemia son un contexto a tener presente.

Estados miembro: una oportunidad

Nicolás González Casares
Nicolás González, eurodputado de S&D y miembro del comité del Plan de cñancer de la UE.

El presupuesto permitirá a los Gobiernos, entre otras acciones, afrontar la carga económica contra el cáncer. Esta es la principal diferencia entre una voluntad o una idea y un plan. La asignación presupuestaria convierte a la lucha contra el cáncer la acción más ambiciosa emprendida por la UE en materia de salud, pandemia aparte.

Pero su interés no deja indiferente a los Gobiernos de los Estados miembro de la UE-26. Con objeto de engranar los planes nacionales o sus estrategias, donde las haya, los países tienen una oportunidad.

Por eso, aquellos que tienen las estructuras para la prevención, investigación y asistencia, para personas con cáncer o con riesgo, podrán recibir recursos que potencien sus capacidades.

Incorporar los recursos del plan europeo es un reto que beneficiará a todos los países de la UE, pero especialmente a los países más preparados, y España se encuentra entre ellos.

La aprobación, hace ahora un año, de la Estrategia Nacional contra el cáncer en España se suma a los planes autonómicos que han desarrollado la mayoría de las CC.AA.

Los grupos de investigación en cáncer que trabajan en España se encuentran entre los más preparados y capacitados para las acciones que el Plan Europea de Europeo ponga en marcha. En definitiva, un sistema sanitario con la calidad y dotación de la sanidad pública es la mejor base para afrontar con éxito los distintos programas de esta apuesta decidida de la Unión Europea por la salud.