África Rebollo,
Ginecólogo
| jueves, 05 de diciembre de 2019 h |

La infección por HPV es la enfermedad de transmisión sexual mas frecuente en nuestros días, de hecho, se estima que el 80 por ciento de la población la contraerá en algún momento a lo largo de su vida. La prevalencia es de 8,2 por ciento en citologías normales en Europa.

En mujeres, es más frecuente por debajo de los 25 años y disminuye por encima de los 30, para volver aumentar entre los 40-45 años, mientras que en los hombres la prevalencia permanece estable a lo largo de la vida.

En la mayoría de casos la infección por el virus del papiloma es asintomática y desaparece sin causar problemas. Sin embargo, durante este periodo sí se puede producir un contagio por contacto genial, vaginal, anal u oral. Es importante saber que el uso del preservativo no protege totalmente, ya que es efectivo en un 60-70 por ciento de las ocasiones.

Otros factores que pueden acrecentar el riesgo de contraer el VPH están estrechamente relacionados con las conductas sexuales. La precocidad, el mal uso del preservativo o la promiscuidad son algunos de los ejemplos. Cada compañero sexual nuevo supone un aumento del riesgo en un 3-5 por ciento.

Cabe destacar que se han identificado más de 200 tipos de HPV, pero los que más nos interesan son los que tienen afinidad por las mucosas. Los de bajo riesgo oncogénico pueden causar condilomas o verrugas genitales, mientras que los de alto riesgo pueden llegar a causar cáncer de Cx. El VPH es una condición necesaria pero no suficiente para el desarrollo de este cáncer. Existen múltiples factores que intervienen incrementando su riesgo, como el estado inmunitario del paciente, el tipo concreto de VPH, la concurrencia de otras enfermedades de transmisión sexual, el tabaquismo, la multiparidad o la toma prolongada de anticonceptivos orales.

El cáncer de cérvix es el 4º cáncer más frecuente en la mujer, responsable del 7,5 por ciento de la mortalidad femenina por cáncer. En 2018 se diagnosticaron 570.000 nuevos casos en el mundo, y se registraron 311,000 fallecimientos, el 85 por ciento de los cuales se produjeron en regiones poco desarrolladas, en las que el acceso a la prevención, diagnóstico y tratamiento es más complicado.

En los países más desarrollados el acceso a la información, los programas de vacunación y el cribado facilitan que las lesiones producidas por el HPV se detecten en fases precoces en las que el tratamiento es efectivo. En estos países la incidencia de cáncer se puede reducir hasta en un 80 por ciento. La educación sexual es un factor importante, asesorando acerca del uso correcto del preservativo, aportando información acerca de los riesgos de la precocidad y promiscuidad sexuales.

La vacunación como medida de prevención primaria para todos los cánceres, tanto para niños como para niñas, se suele administrar a los 12 años. A esta edad la inmunogenicidad es mayor que a los 18 y además no han tenido contacto sexual. En España la vacunación está disponible desde 2007 y existen 3 vacunas en el mercado que previenen de diferentes tipos de HPV.

El cribado se utiliza como método de prevención secundaria para los cánceres de cérvix, vulva y vagina, pero no otros VPH dependientes. En España el ministerio recomienda comenzar los programas de cribado a los 25 años. Entre los 25 y 34 años recomienda citología vaginal cada 3 años y entre los 35 y 65 test de detección de HPV. Si las pruebas son negativas se continua con el protocolo de cribado. En caso contrario hay que llevar a cabo otras medidas diagnósticas.

Dadas las consecuencias negativas para la salud del VPH, se infiere la necesidad de efectuar actuaciones a fin de prevenir dichas consecuencias, como la detección temprana del VPH. La Asociación Americana Contra el Cáncer recomienda la realización entre los 30 y los 60 años de citología vaginal y detección de papiloma conjuntamente. Recientemente se ha presentado en nuestro país un test de detección del HPV que la mujer se puede realizar en casa, el Easy HPV Test.


A partir de los 25 años la citología vaginal y la detección del virus del papiloma humano son recomendables