Cada semana aparece sobre la mesa una nueva propuesta que aspira a paliar, en la medida de lo posible, el acuciante déficit de profesionales. La semana pasada, por ejemplo, GM ponía el foco en la pediatría, desgranando situaciones vividas en los centros de salud en un momento marcado por los festivos en el calendario.
Esta vez, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria se ha encargado de visibilizar la situación de estos profesionales. Apenas se cubren un 25 por ciento de las bajas o ausencias y, lo que es más, los profesionales tienen que asumir los pacientes de los cupos de los compañeros que no pueden pasar su consulta llegando a duplicar y triplicar al número de niños atendidos, recuerdan desde la asociación.
Además, no siempre reciben reciben una compensación por esta actividad y, cuando la hay, no cubre ni de lejos el coste que supondría para la administración contratar a otro pediatra que pudiera hacerse cargo de manera temporal de ese cupo de pacientes, advierten.
Las dificultades para contratar, o retener, a profesionales de atención primaria son un desvelo para los gestores sanitarios. La precariedad en las condiciones laborales, tantas veces denunciadas por los médicos de familia, estalla ahora en numerosas comunidades autónomas en forma de huelgas y movilizaciones. Un caldo de cultivo difícil en un momento de tensión para el sistema sanitario.
Jubilación activa
Desde el gobierno socialista se dibujan fórmulas para hacer frente a este déficit de profesionales. La última medida es el proyecto de jubilación activa en atención primaria y pediatría anunciada a principios de este mes de diciembre. Una manera de preservar recursos valiosos y profesionales experimentados que se ve con buenos ojos desde la profesión médica, siempre y cuando se trate de algo voluntario y el profesional mantenga intactas sus condiciones físicas y psíquicas, obvia decir.
La iniciativa se suma a otras que ponen el foco a largo plazo, como la ampliación del número de plazas en las facultades de medicina, el incremento de las plazas de formación de especialistas. En este caso, un encaje difícil porque supone echar cuentas con profesionales que tardarán una década en estar disponibles. Y es que un médico no surge de la nada ni se forma en dos días, insisten.
Interterritorial urgente
Desde la oposición, el Partido Popular ha dado un nuevo paso al frente reclamando la celebración de un Interterritorial urgente para abordar el déficit de especialistas en el primer nivel asistencial. Es el tema central de una Proposición No de Ley en la que aseguran que no hay “progresos tangibles” hasta la fecha, a partir del análisis de los consejeros de Madrid, Galicia, Castilla y León, Andalucía, Murcia y Ceuta, que mantuvieron una reunión sobre este asunto a mediados de noviembre.
El texto, eso sí, defiende incentivar a los profesionales jubilados que quieran permanecer en activo, y fomentar otras medidas como los concursos de méritos para fidelizar a los médicos de familia en sus puestos.
En el balance anual de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), su presidente también pone el acento en la necesidad de un diálogo sensato para conseguir mejoras en atención primaria. Comparten la sensación de hartazgo con los profesionales que protestan en las calles, pero son conscientes de que si aspiran a una mejora en el sistema, no hay otro camino que el diálogo y el consenso, más allá de debates electoralistas, tal y como defiende su presidente, José Polo.
