Echando la vista atrás, 2021 puede considerarse como un año de transición dominado aún por el peso de la pandemia de COVID-19. En el ámbito sanitario, la preocupación principal ha sido hacer frente a las sucesivas olas, mientras se recuperaba la atención sanitaria a otras patologías y se definían los mimbres con los que se hará frente a medio plazo a otros problemas con gran peso en el futuro, como es la atención a la salud mental.
Todas estas inquietudes, que en realidad son comunes a los gestores sanitarios y a la ciudadanía, han tenido también un reflejo en la actividad parlamentaria. En este número, GACETA MÉDICA ha querido analizar las iniciativas que han centrado la atención en una de las dos cámaras que vertebran el poder legislativo en nuestro país, el Congreso de los Diputados. Hemos tomado el pulso a la actividad de los grupos políticos con representación en la cámara baja y hemos observado con satisfacción que la conexión que acerca al ámbito de la política las preocupaciones del día a día funciona.
El Congreso ha debatido un total de 138 PNL desde enero de 2021
Muchas demandas de los profesionales, véase la creación de las especialidades de Urgencias y Enfermedades Infecciosas, tienen un altavoz a través de las iniciativas de algunos grupos. Lo mismo sucede con el interés por la atención primaria, o las reclamaciones de los pacientes que insisten en que es necesario reforzar la atención a la salud mental antes de que sea demasiado tarde. Temas que, al igual que la preocupación por la atención a los pacientes con cáncer o el acceso a la innovación para mejorar su calidad de vida han copado el debate de los diputados en la Comisión de Sanidad.
En nuestro análisis de esta semana, que os invitamos a leer con calma, se puede constatar que la gestión de la COVID-19 sigue acaparando el grueso de la actividad. Desde enero de 2021 hasta este año, el Congreso ha debatido un total de 138 Proposiciones No de Ley con las que los grupos políticos instan al Gobierno a adoptar sus propuestas. Cada uno de los grupos, además, muestra así su sensibilidad con unos u otros temas. El compromiso del Partido Popular, por ejemplo, en términos de innovación, se hace evidente en este análisis, al igual que con el reconocimiento de las nuevas especialidades. Mientras, PSOE y Ciudadanos lideran las propuestas en materia de salud mental, por ejemplo.
Más allá de los temas sobre la mesa importa, y mucho, que el congreso siga siendo un espacio para el debate, un lugar común en el que acercar posturas para seguir avanzando y marcando prioridades al Ejecutivo en aquello que, en definitiva, nos preocupa a todos.