Sólo crecer al 0,8% trimestral permitirá incrementar el presupuesto sanitario de PP y C’s

La semana pasada comentaba la iniciativa-petición de Coalición Canaria (CC) de igualar el gasto sanitario por habitante. Ahora que ya se ha materializado el apoyo favorable (aunque inútil como mayoría) de PP, C’s y CC en la investidura, la petición merece ser analizada en el contexto de los otros dos partidos. Decía que la mecha se había encendido, y parece que ha prendido. Es posible que alguno piense que no sirve de nada porque son probables unas terceras elecciones…¿Es que la fórmula de Partido Popular (PP), Ciudadanos (C’s), CC y otro (si fuera necesario) no se volvería a reeditar? De una manera o de otra, va a haber Gobierno en España, tarde o temprano. Y es altamente probable que de los 170 diputados actuales se aproximen algo más a la línea de 176 que ofrece la mayoría para formar Gobierno. Por tanto, lo que ahora decidan será una buena base en caso de terceras elecciones que, esta vez con más probabilidad, podrían hacer que España tuviera un Gobierno. Y lo que hayan firmado y acordado antes, es probable que se reedite.

El programa del Partido Popular (PP) y Ciudadanos (C’s) contemplaban en las pasadas elecciones la corrección de las diferencias en la inversión en Sanidad entre los territorios. El PP ya contemplaba antes de su pacto con C’s subir el gasto en sanidad pública hasta 47 € por habitante y año. El acuerdo lo ha elevado a 100 €, y el gasto que existía precrisis es algo mayor, de 126 €. Sin duda es un cambio de tendencia y una señal clara de que la sanidad no tendrá nuevos ajustes, sino lo contrario. De esta manera, nos situaremos aún en un 10% menos de gasto por habitante y año respecto a 2010, cuya media alcanzó la cifra récord de 1.493 euros.

Lo que no cuentan desde el PP y C’s, aunque tampoco vamos a pedirles que se pongan pesimistas, es que es necesario mantener un crecimiento trimestral del PIB de, al menos, un 0,8% en el segundo semestre de 2016. ¿Por qué? Porque si no lo hacemos, no existe manera de destinar dinero a Sanidad sin incurrir en un incumplimiento de las condiciones de Bruselas, que exige mantener un déficit del 4,6% (en 2016), 3,1% (en 2017) y 2,2% (en 2018).

Si la idea general de PP, C’s y CC es reducir las diferencias autonómicas, una vía sería obligar a las CC.AA. a destinar un suelo de su presupuesto a Sanidad. Aquí la paradoja está servida: aunque muchas CC.AA. solicitan más fondos sanitarios, ninguna estaría dispuesta a que Madrid les indicara la cantidad. Y menos País Vasco y Cataluña. Lo mejor sería que todos fueran conscientes de que hay que ceder un poco de soberanía por garantizar una mayor equidad en el reparto de los fondos sanitarios, aunque debamos tener un Personal Trainer en forma de Gobierno central. Si es para conseguir que estemos en forma, merecería la pena el sacrificio de los territorios.

Otra forma de ver la situación es aceptar que uno no puede defender una cosa y la contraria: si las CC.AA. han demandado más presupuesto para Sanidad, lo lógico es que el Gobierno de turno se asegure que el dinero proporcionado para ese fín se destine a Sanidad, y no a otros devaneos territoriales, tan frecuentes en nuestra geografía.