Si a finales de marzo los ministros de la Unión Europea se mostraban partidarios de la compra centralizada como solución a los problemas de acceso a los medicamentos, ahora llega el turno de manifestar su acuerdo para conjugar el freno de la escalada de precios, facilitar el acceso y mantener la sostenibilidad. En esta línea, el pasado 9 de mayo, los ministros de salud de la UE celebraron su tercer encuentro con los directores ejecutivos y presidentes de empresas farmacéuticas europeas en Malta, para debatir sobre cómo mejorar la sostenibilidad global de la asistencia sanitaria y el acceso al tratamiento para los pacientes.
Esta reunión vino marcada por otra cita que tuvo lugar el día anterior, 8 de mayo en la misma ciudad, y cuyos resultados han trascendido más allá. Los ministros de salud de Malta, Chipre, Grecia, Italia, España y Portugal, celebraron su propia reunión y la ‘sellaron’ con la firma de la denominada ‘Declaración de La Valeta’.
La declaración conjunta, recoge la manifestación de los ministros sobre el acuerdo para cooperar en plena confianza, lealtad, solidaridad y transparencia para un mejor acceso a los medicamentos. El objetivo del texto no es otro que garantizar a los pacientes el acceso a los medicamentos innovadores mientras que se mantiene la sostenibilidad de los sistemas de salud. Y con ello, tratan de mejorar su cooperación y negociar conjuntamente con la industria farmacéutica sobre la fijación de precios de los medicamentos.
Hay que destacar que durante su mandato para la presidencia semestral del Consejo de la UE, Malta está desarrollando una agenda que apuesta de forma contundente por el trabajo conjunto en temas de salud y por la cooperación estructurada entre los sistemas sanitarios. Así, la Declaración de La Valeta es un acuerdo de cooperación inexistente hasta el momento. El texto firmado inicialmente ya se ha ampliado a Irlanda, Eslovaquia y Rumanía y está abierto a que la firmen en cualquier momento otros Estados miembros.
El plan de los países firmantes pasa por crear una Comisión Técnica para explorar las diversas estrategias y modelos de cooperación voluntaria, que incluye aunque no se limitaría a, “compartir información, identificar las mejores prácticas, explorar el horizonte de medicamentos y tratamientos innovadores, explorar posibles mecanismos para negociaciones de precios y adquisición conjunta“.
Hay que recordar que en junio de 2016, los responsables de salud de la UE avanzaron en su unión contra el aumento del precio de los medicamentos, reconociendo que, en muchos casos, los fallos del mercado impidieron que los medicamentos llegaran a los pacientes que necesitaban tratamiento. Los ministros expresaron su preocupación porque el sistema existente de precios no fuera equilibrado y porque no siempre promueve el mejor resultado posible para los pacientes y la sociedad. Como también hicieron ya en la pasada reunión celebrada el 24 de marzo. Además, se animó a los Estados miembros a explorar las estrategias para emprender la negociación conjunta de los precios con la industria farmacéutica y, además, se les instó a llevar a cabo un intercambio de información en la fase anterior a que comiencen las negociaciones con los fabricantes de medicamentos. Lo cierto es que ya hay acuerdos que se asemejan, y que fueron consignados por varios países de la UE, como el Benelux con Austria; Bulgaria y Rumania, así como la República Checa y Lituania.
Por su parte, el ministro de Salud de Malta, Chris Fearne, ha manifestado en sucesivas ocasiones que la accesibilidad y la asequibilidad de los medicamentos como una prioridad. “Nos gustaría ver más transparencia en la forma en que las compañías farmacéuticas negocian con las autoridades de compras”, planteó en una entrevista con Euractiv. Y aclaró que se refería a que a los países y autoridades de compras no se les permite compartir los precios que obtienen entre sí. Para Fearne, hay un movimiento para empezar a hablar sobre cómo introducir medidas para hacer las negociaciones más transparentes, algo que podría bajar los precios y por lo tanto hacer los medicamentos más accesibles a los pacientes”, destacó el político maltés.
La candidatura de Barcelona para la EMA llega a Malta
La ministra de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, ha trasladado la candidatura de Barcelona par acoger la Agencia Europea del Medicamento (EMA) a la sede del Consejo de la Unión Europea. Con motivo del encuentro de ministros de salud, una delegación española encabezada por la ministra viajó a Malta donde presentó la candidatura de la ciudad condal para albergar la sede de la Agencia Europea del Medicamento tras el Brexit. En este contexto, Montserrat se reunió con sus homólogos de Malta, Chris Fearne; Grecia, Andreas Xantos, Irlanda, Simon Harris; Bélgica, Maggie De Block; Italia, Beatrice Lorenzin; Portugal, Adalberto Campos; Chipre, George Pamboridis; Rumania, Florian-Dorel Bodog y el profesor Stanislav Špánik, en representación del Ministro Eslovaco, Tomas Drucker.
La sintonía ha reinado entre los dirigentes en su apuesta porque los criterios “criterios absolutamente técnicos y no políticos” sean la base de la decisión que deberá adoptar el próximo Consejo Europeo de Junio y que escogerá los criterios en los que todos los países habrán de apoyarse para presentar sus candidaturas. Al respecto, la ministra de Sanidad ha reafirmado que “Barcelona cumplirá sin problemas con los objetivos. Porque aseguramos la celeridad e inmediatez del traslado, la continuidad de los trabajos que se están llevando en la EMA, que no haya pérdida de talento y, con todo esto, la garantía de no poner en riesgo la salud de los ciudadanos de Europa”. Así, desde el Ministerio destacan que Barcelona ofrece un edificio para albergar la sede “con llaves en mano”. La Torre Glóries, estarían disponibles de forma inmediata y disponen de capacidad para albergar a los más de 900 trabajadores de la EMA y 30.000 metros cuadrados. Así, el ministerio apunta que “todo esto garantiza un traslado rápido, sin que la actividad de la agencia y el talento se pierdan por el cambio de ciudad”.