El Global Madrid | martes, 17 de septiembre de 2019 h |

Ya hace varios años que País Vasco se une a las celebraciones del Día de la Seguridad del Paciente, que tiene lugar este 17 de septiembre; además, tras la última Asamblea de la Organización Mundial de la Salud (OMS), celebrada esta primavera, se ha establecido que esta cita sea el Día Mundial de la Seguridad del Paciente. El objetivo de esta fecha es movilizar a pacientes, trabajadores de la salud, encargados de formular políticas, académicos, investigadores, redes profesionales y la industria del cuidado de la salud para que pongan la seguridad de los pacientes en el centro de la agenda.

Por ello, entre el 16 y el 22 de septiembre, el Departamento de Salud y Osakidetza, han organizado por segundo año consecutivo diferentes actividades informativas y de divulgación, en el marco de la II Semana de la Seguridad del Paciente. Esta iniciativa forma parte de la Estrategia de Seguridad del Paciente 2020, cuyo fin principal es profundizar en la Estrategia 2013-2016, que ya incluía varias medidas para trabajar en esta materia.

La consejera de Salud de País Vasco, Nekane Murga, señala que es necesario perseverar en el esfuerzo colectivo para lograr la máxima seguridad y esto implica seguir avanzando para que la cultura de la seguridad del paciente eche raíces profundas y sólidas en Euskadi. Para ello, y en un sistema sanitario avanzado como el nuestro, es fundamental el esfuerzo conjunto de la organización y sus profesionales, pero también el de la ciudadanía. Por ello, para fomentar la implicación de la ciudadanía en temas que atañen a la seguridad del paciente, profesionales de Osakidetza, estudiantes de ciencias de la salud y asociaciones de pacientes se encargarán de informar a la población de la importancia de participar en esta tarea haciendo hincapié en tres aspectos clave: identificarse correctamente cuando se acude a los centros sanitarios, conocer su tratamiento habitual y realizar una correcta higiene en las manos, una de las principales medidas para prevenir la transmisión de infecciones. Las actividades planteadas pretenden concienciar sobre las medidas que pueden aplicarse en el caso de que se den fallos durante la asistencia, dando herramientas a los pacientes para actuar en caso de que sea necesario, pero inculcando que la mayor parte de la responsabilidad debe recaer en el sistema sanitario.