El Global Madrid | jueves, 14 de noviembre de 2019 h |

De los más de 7.000 medicamentos que se encuentran en desarrollo en todo el mundo, 475 se están investigando para tratar distintos tipos de diabetes. Así lo asegura la patronal de la industria farmacéutica innovadora, Farmaindustria, que, además, señala que España ocupa actualmente un lugar destacado en esta patología. Y es que, según datos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), en los últimos cuatro años se supera el centenar de ensayos clínicos en esta patología.

Con motivo del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra este jueves, la patronal ha realizado un repaso por los grandes avances farmacológicos que se han realizado en esta patología. Así, recuerdan que hacia 1980, la producción de la insulina humanizada a partir de una técnica recombinante revolucionó el tratamiento de la diabetes, el cual se reimpulsó posteriormente con la segunda generación, los denominados análogos de insulina humana, que presentan características farmacocinéticas que permiten mejorar el perfil de utilización de las insulinas convencionales. Existen varios tipos de análogos de insulina humana, que pueden ser de acción lenta, intermedia, rápida y prolongada.

Además de los distintos tipos de insulinas mencionadas, señala la patronal innovadora, se han desarrollado nuevas formas de liberación de la insulina, como las plumas precargadas, las bombas de infusión o la insulina inhalada. Estos avances han facilitado su utilización, aumentado la satisfacción de los pacientes y elevando las tasas de cumplimiento del tratamiento, que se traduce en una menor morbilidad y mortalidad y en una reducción de la tasa de hospitalización y de visitas médicas, lo que repercute a su vez en el coste económico para el sistema sanitario, tal y como se refleja en el estudio El valor del medicamento desde una perspectiva social, realizado por la Fundación Weber.

Además de las insulinas, existen distintos tipos de medicamentos antidiabéticos no insulínicos que han permitido ampliar el arsenal terapéutico disponible. Entre los más recientes destacan los inhibidores de la dipeptidil peptidasa-4 y los inhibidores del SGLT2, que han demostrado no solo controlar la glucosa en sangre, sino también reducir el riesgo de accidente cerebrovascular en subgrupos de pacientes con diabetes tipo 2.

Pero la investigación no se detiene y en el futuro se divisan soluciones encaminadas a mejorar tanto el diagnóstico como la efectividad, incluso la prevención. Así, la industria farmacéutica, junto a otros grupos de investigación, están centrando sus esfuerzos en hallar indicadores de predicción fiables para la diabetes tipo 1, medicamentos más eficaces con un manejo más sencillo para el paciente, sustitutos de la insulina administrados por vías alternativas o fórmulas para proteger las células beta del páncreas e, incluso, sustituir las células dañadas.