A.N.S . Madrid | viernes, 20 de enero de 2017 h |

El año 2016, el ya conocido como el año del desgobierno, ha sido un periodo de calma legislativa y normativa. La farmacia ha vivido con tranquilidad y sin dejar de trabajar de cara a anticiparse ante las medidas que se vayan a poner en marcha una vez conformado el gobierno y con Dolors Montserrat como titular del Ministerio de Sanidad. Con la lección bien aprendida por lo acontecido en el pasado, la farmacia ha intensificado su labor de lobby para explicar, convencer e intentar conseguir un trato más favorable al sector que el vivido en los últimos tiempos. La farmacia ha soportado sobre sus espaldas el peso de la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y busca convertirse en aliado y no en víctima. Ese trabajo se ha concretado en reuniones y tomas de contacto entre los agentes del sector y los decisores. Consejo General, Fedifar, CEOE, o los propios Colegios de Farmacéuticos a nivel de sus regiones y autonomías han sabido entender el momento y han actuado con responsabilidad y en representación de los intereses de la farmacia.

Lejos de la arcaica e injusta fama atribuida a la actividad de lobby, hoy por hoy estamos ante una herramienta importantísima a la hora de defender los derechos de un colectivo o un sector. Esta actividad, perfectamente regulada a nivel europeo y estadounidense poco a poco va siendo regulada en España. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) mantiene un registro de grupos de interés en el que, de manera totalmente voluntaria, organizaciones, empresas, fundaciones o entidades se inscriben para dotar de transparencia sus relaciones con los sectores en los que operan. Según la propia CNMC, el Registro de Grupos de Interés se ha creado para dar respuesta a preguntas básicas como qué intereses se persiguen y quién los defiende. Dentro del sector, entidades como Aproafa que delega esta actividad de lobby en el CGCOF y en Fedifar; Cofares o Wecare-u, empresa editora de EG y GM están inscritos en este registro. A nivel de comunidades autónomas, también existe un creciente interés por dotar de normalidad a la actividad de lobby lo que ha llevado a Cataluña a crear su propio registro de grupos de interés. La inscripción en estos grupos supone la aceptación de un código de conducta que asegura la transparencia y las buenas prácticas en las actividades de lobby.

Carlos González Bosch, presidente de Cofares y de la Comisión de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad de la CEOE tiene claro que el trabajo de lobby “es fundamental, pero un lobby moderno, con luz y taquígrafos, con responsabilidad, ideas, críticas y soluciones”. González Bosch señala a la colaboración público-privada, el nuevo espacio sociosanitario o a la repetición de pactos por la sostenibilidad como el firmado por Farmaindustria como algunos de los temas sobre los que hay que insistir en esta legislatura, “la colaboración público privada es fundamental para la sostenibilidad del sistema y actualmente se cuestiona solamente por aspectos ideológicos cuando existen infinidad de estudios que garantizan su existencia como elemento de sostenibilidad”, precisa González Bosch. Ante la llegada de nuevos rostros a la sanidad, el presidente de Cofares cree importante esa labor de asesoramiento “es la oportunidad para poner encima de la mesa los problemas y sus soluciones, eso en un sector tan regulado como el nuestro, es clave, hay que ofrecer alternativas desde el consenso y el diálogo”.

El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos ha trabajado intensamente en este periodo de ‘calma normativa’ con unos claros objetivos a la hora de trasladar a las autoridades sanitarias. El desarrollo de los acuerdos marco suscritos con el Ministerio de Sanidad o el desarrollo de la Farmacia Asistencial son algunos de ellos. El fin último de ese trabajo de influencia del CGCOF es conseguir una Farmacia Comunitaria que se asienta en tres grandes valores: sostenibilidad, profesionalidad y transparencia y que busca además el impulso de herramientas tecnológicas como Nodofarma, el Dossier farmacéutico o la Atención Farmacéutica centralizada. El trabajo de lobby del CGCOF se estructura dentro del organismo con la creación de grupos de trabajo dentro de la Organización Farmacéutica Colegial en diversas materias.

La patronal de la distribución Fedifar también se ha mostrado muy activa durante 2016. Su actividad se ha centrado en reuniones con los grupos políticos y dirigentes de comunidades autónomas en las que han dado a conocer su labor, cómo se trabaja y el papel que desempeñan dentro del sistema nacional de salud. En definitiva, muy centrados en remarcar el valor del sector de la distribución en España.

El esfuerzo por divulgar la capacidad de la farmacia española por ayudar a la sostenibilidad del SNS sin menoscabar el crecimiento y la propia sostenibilidad del sector está realizado. Es el momento ahora de ver si se tiene en cuenta esa labor y de seguir insistiendo en esa manera de influir transparente, con ‘luz y taquígrafos’, responsabilidad, consenso y diálogo. Es el camino, la única manera de conseguir que el sector no acabe soportando en exclusiva el peso de la sostenibilidad del sistema.