Marta Riesgo Madrid | martes, 05 de noviembre de 2019 h |

Uno de los retos que tendrá sobre la mesa el Gobierno que resulte de las elecciones este domingo 10 de noviembre es el de renovar el pacto por la sostenibilidad establecido con Farmaindustria y que vincula el gasto farmacéutico a la evolución del PIB. Un nuevo acuerdo que, según la patronal de la industria innovadora, debe incorporar cambios. “El nuevo convenio debería incluir a todos los agentes, y no sólo a las compañías innovadoras y a los productos de marca; todos deben comprometerse con la sostenibilidad y no solo nosotros”, ha especificado el presidente de Farmaindustria, Martín Sellés, durante la inauguración del XVI Seminario Industria Farmacéutica & Medios de Comunicación que la organización está celebrando este martes en Chinchón.

En este sentido, el presidente de Farmaindustria recuerda que los fármacos de marca representan “tan solo el 65 por ciento del gasto total de medicamentos”, razón por la que considera que, tanto el sector de los genéricos como el de los biosimilares, que representan el 35 por ciento del gasto farmacéutico, deben incorporarse al convenio. El nuevo acuerdo debe tener en cuenta lo que aporta el sector a la economía del país y debe tomar como referencia el PIB real y no el nominal, como hasta ahora establece el acuerdo. Estas peticiones son esenciales para una patronal que no baraja la renovación del acuerdo tal y como se ha establecido hasta ahora.

Otra de las peticiones para que la patronal establezca un nuevo acuerdo es que se tengan en cuenta sus reflexiones sobre el nuevo plan de genéricos y biosimilares. Si no se tienen en cuenta, ha señalado Sellés, “el convenio no tendría sentido”. En este sentido, la patronal ya aseguró que este plan “parte de premisas cuestionables” y que propone medidas que, “sin aportar ventajas al paciente ni a la calidad del sistema sanitario, podrían generar desequilibrios entre compañías”, saliendo perjudicadas, a su juicio, las que comercializan medicamentos originales. La más importante de esas medidas, para Farmaindustria, es la de generalizar la prescripción por principio activo (PPA), relegando la prescripción por marca a casos excepcionales. Tampoco resultan evidentes, para Farmaindustria, las ventajas de fomentar que tratamientos ya instaurados con medicamentos biológicos (originales o biosimilares) se vayan a intercambiar sin contar expresamente con el médico responsable de la prescripción.