GM Madrid | viernes, 04 de mayo de 2018 h |

La actualización del Plan de Estabilidad sellado el pasado 27 de abril en el Consejo de Ministros y remitido a Bruselas trae malas noticias para la sanidad. En 2018, el Gobierno tiene como objetivo que España salga del Procedimiento de Déficit Excesivo y que se cierre al año con un déficit del 2,2 por ciento del PIB para “seguir enviando a los mercados un mensaje de prudencia y sensatez en el manejo de las cuentas públicas”. En este mensaje se entienden los nuevos objetivos de control del gasto sanitario: el primer esfuerzo presupuestario se prevé ya para este año, que según las previsiones finalizará con un peso del 5,87 por ciento del PIB. La cifra bajará hasta el 5,77 por ciento para el año 2019 y hasta el 5,66 por ciento en 2020. Texto sin sangría.

Entre las tareas para este año, el Gobierno destaca ante la Comisión que este ejercicio continuará el proceso iniciado en 2017 para la reforma del Sistema de Financiación Autonómica. Informa para ello de que el 21 de marzo de 2018 finalizaron en el seno del Comité Técnico Permanente de Evaluación los trabajos y discusiones técnicas necesarios para reformar el sistema y asegura, aunque sin establecer un calendario para ello, que se presentará un borrador de informe sobre las posibles modificaciones del sistema que se fundamente en los principios de solidaridad, suficiencia, equidad, transparencia y corresponsabilidad fiscal, garantizando un sistema justo y equitativo. Tras ser discutido en el Comité Técnico Permanente de Evaluación, este informe será elevado posteriormente al Consejo de Política Fiscal y Financiera y negociado de forma multilateral con las comunidades autónomas. Se discutirá y votará la propuesta de reforma en el CPFF, a partir de cuyo acuerdo se elaborará y aprobará el Proyecto de Ley de Reforma del Sistema, que se remitirá a las Cortes Generales para su tramitación y aprobación.