J.P.R. Madrid | viernes, 31 de marzo de 2017 h |

Arturo Fernández-Cruz ha recibido la Gran Cruz de la Sanidad Madrileña por su trayectoria profesional. El también presidente del Comité Científico de Fundamed analiza en esta entrevista los últimos avances en el campo de la medicina y sus grandes retos.

Pregunta. ¿Qué significa este reconocimiento?

Respuesta. Que la Comunidad de Madrid haga un reconocimiento a mi trayectoria constituye un privilegio, algo que hace disfrutar de manera especial a esos sentimientos que tenemos los humanos en los cuales pesa el agradecimiento.

P. ¿Qué papel pueden jugar las nuevas tecnologías en el empoderamiento del paciente?

R. Vivimos uno de los escenarios más apasionantes en el mundo actual y que tiene una expresión en el campo de la medicina. Estamos trabajando en la aplicación Madrid StayApplive que tiene como diana a las personas de entre 35 y 90 años. Hemos podido aumentar la empoderización del ciudadano. Lo frecuente es que nosotros dañemos el ADN como consecuencia de la adaptación a nuestro ecosistema. En nuestra estructura de ADN hay unos marcadores epigenéticos y su grado de metilación establece lo que se llama la fragilidad de ese alfalbeto que es responsable de que se exprese o no una enfermedad. El gran descubrimiento que hemos hecho es que esos marcadores epigenéticos dentro del ADN dependen de algo tan simple como hacer ejercicio, fumar, el estrés crónico, la dieta… Por tanto la herramienta intenta convertirse en una especia de coach para ayudarle a conseguir esas metas. A través de estos cuestionarios establecemos el riesgo de padecer enfermedades crónicas. En algunos casos se va a descubrir de forma temprana que el ADN se ha dañado. Por tanto, la detección temprana o la prevención de estas enfermedades crónicas es el objetivo fundamental de la aplicación y lo hacemos en este lenguaje modero de la inteligencia artificial con algoritmos.

P. ¿En que situación se encuentra la aplicación?

R. Ha pasado su primera fase. Cualquier persona en el momento actual la puede probar. Nosotros tenemos ya el prototipo y estamos en fase de ensayo. Lo que requiere esta etapa es que conozcamos y aprendamos con la experiencia de su uso el poder conocer lo que es más importante de la aplicación. Hacerla viral, que el individuo se sienta confortable con su uso de manera sistemático y además, como nosotros le damos una lectura de la evolución, que constituye su riesgo y cómo lo ha mejorado o cómo ha aparecido un nuevo riesgo. Este sistema de coaching queremos marketizarlo de una forma actualizada.

P. ¿Cómo puedo contribuir el abaratamiento del coste de la secuenciación del ADN en la medicina?

R. Eso es está en manos de la tecnología. El problema no está en el concepto de cuánto lo podemos abaratar, sino la utilización de la inteligencia artificial de big data. Hasta ahora, no hemos podido integrar un algoritmo con alta credibilidad nada más que en un grupo pequeño de enfermedades. Las más corrientes aún están en manos de una aplicación de juicio clínico de probabilidad en relación con un resultado todavía complicado. Otro de los elementos clave en esta identificación del riesgo es la longitud del telómero.

P. ¿Y en cuanto a la tecnología Crispr?

R. Constituye la revolución. Estamos en la lectura de si no solo podemos aumentar la esperanza de vida, sino que nosotros podemos rejuvenecer. Afortudamente, hay algunas figuras españolas que están en esa tecnología como es Juan Carlos Ispisúa que nos dio la lección memorial de la Fundación Fernández Cruz el año pasado. El problema fundamental de las células cuando van envejeciendo es que llega un momento en que no pueden dividirse. Perdemos la capacidad de regenerar. Por tanto, la única manera de rejuvenecer es caminar hacia atrás. Eso es lo que han logrado las tijeras genéticas.

P. ¿Qué otras herramientas tiene el médico en la consulta?

R. El médico tiene herramientas tecnológicas. Estados Unidos ha financiado con la medicina de precisión. Somos capaces en el momento actual de llegar a diagnósticos de certeza y hacerlo de forma muy cercana y con muchísima calidad. El futuro está en ese desarrollo tecnológico. La nanotecnología es el gran reto que tiene la medicina hoy. Si identificamos que para establecer un riesgo debemos intentar conocer de forma temprana el daño del ADN, ahí podemos generar una tecnología que identifica ese daño en la sangre o en el tejido circulante mediante la biopsia líquida y lo hacemos 15 o 20 años antes de que esto ocurra. Su carácter predictivo es inmenso y la capacidad que tenemos de prevenir la mayoría de procesos médicos o que llevan al envejecimiento constituye un reto brutal. La nanotecnología hará cambiar el concepto oncológico. Por eso, una serie de profesionales consideramos que el concepto de inmortalidad debe ser revisado.

P. ¿Cuándo podremos aplicar la nanotecnología del SNS?

R. EL SNS tiene un inconveniente y es que tiene que ser sostenible y por lo tanto su forma de incorporarse a lo que constituye la aplicación clínica habitual tiene que ser documentada por la ciencia. Si me pregunta que cuándo será documentada por la ciencia. Yo no creo que superemos los tres o cinco años. Si eso es aplicable al SNS va a depender de la sostenibilidad. Eso requiere otra ingeniería, pero en este caso económica.

P. Un grupo de expertos lanzó una serie de recomendaciones para el lanzamiento de una estrategia de precisión, ¿cree que es el camino adecuado?

R. Absolutamente sí. Hacer grupos de expertos para intentar familiarizar a lo que constituye el sistema social-político sobre la necesidad de este tipo de atención y de inversión, considero que es el paso más importante que podemos hacer en el momento actual.

P. ¿Qué proyectos tienen por delante en la actualidad?

R. En septiembre, tenemos la lección memorial Fernández-Cruz que se la hemos dado a María Blasco, que va a desarrollar el tema del que ella es experta, que es relacionar el cáncer y el envejecimiento. Relacionando las dos estructuras, hemos descubierto alguna de las herramientas para rejuvenecer al ser humano.

LAS FRASES

Una serie de profesionales creemos que el concepto de inmortalidad debe ser revisado”

El Sistema Nacional de Salud tiene un inconveniente y es que tiene que ser sostenible”