Alberto Cornejo Madrid | jueves, 09 de marzo de 2017 h |

Un día después de que la SEFH refrendase los argumentos que recoge en un dossier para defender las “ventajas clínicas y económcias” presencia y dispensación de medicamentos de DH en los hospitales, la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (Sefac) ha replicado con un manifiesto que supone una suerte de “enmienda a la totalidad” a los pareceres de la farmacia hospitalaria.

De partida, Sefac indica que todos aquellos medicamentos “que el paciente pueda utilizar a nivel sociosanitario, sean prescritos en el ámbito de la atención especializada o de la atención primaria (AP), deberían ser dispensados desde la farmacia comunitaria”. Lo contrario, a criterio de Sefac, “obedece a intereses corporativistas y/o mercantilistas que nada tienen que ver con la mejora atención sanitaria al paciente ni la eficiencia del sistema”. Cabe recordar que, por su parte, el documento de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) denunciaba que la intención de la farmacia comunitaria por la vuelta de estos medicamentos respondía a “intereses comerciales, no clínicos o asistenciales”. También desde el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, su presidente, Jesús Aguilar, ha manifestado este mismo 9 de marzo que “los medicamentos de DH tienen que estar en las farmacias, por sentido común y por el beneficio del paciente”.

Otras de las argumentaciones que replica Sefac hace referencia a la supuesta consecución de “mayores niveles de adherencia terapéutica” que la SEFH atribuía a la farmacia hospitalaria frente a la botica respecto a los medicamentos de DH sin cupón precinto. El dato —en concreto el Plan de Adherencia de Farmaindustria— “es una interpretación científicamente muy poco rigurosa de un estudio que no compara farmacia comunitaria con hospitalaria y del que la SEFH pretende inferir que las diferencias de adherencia entre pacientes con diferentes patologías son debidas exclusivamente a su actuación, algo que no se puede afirmar ya que es evidente que ni las patologías ni el tipo de paciente son comparables y cualquier conclusión al respecto es meramente especulativa”, replica Sefac. En concreto, la SEFH apuntaba a la consecución de niveles de adherencia en el hospital en torno al 70-80 por ciento, los cuales rebajaba al 55 por ciento en la botica. “La única forma de comparar con rigor científico sería trabajar con grupos homogéneos, es decir, pacientes en la misma situación (patología, tratamiento…) pero atendidos en los dos niveles asistenciales”, se concreta desde Sefac.

La perspectiva económica también es confrontada. Respecto a los cálculos de la SEFH para sopesar que el retorno al canal farmacia de estos medicamentos supondría un gasto añadido al SNS en torno a 500 millones de euros anuales, la sociedad que preside Jesús C. Gómez critica que se base en estimaciones y cifras “no provenientes de organismos oficiales”, y sea “especulativa”.

Asimismo, para Sefac otra “nota llamativa” del documento es que ante la evidente dificultad de acceso que genera una dispensación exclusivamente hospitalaria, “la SEFH pretende solucionarla con la tentativa de poner repartidores de medicamentos a domicilio”. Para esta sociedad científica, esta propuesta obvia que el paciente dispone de un farmacéutico al lado de su domicilio que conoce su medicación, que puede efectuar un seguimiento farmacoterapéutico más próximo y frecuente a lo largo del tiempo y que puede coordinarse con el resto de profesionales sanitarios.

Sefac reconoce que es evidente que hay medicamentos, los hospitalarios, que por sus características y situación del paciente deben ser diagnosticados, dispensados y seguidos en el hospital. Sin embargo, concreta, “los medicamentos DH son aquellos que según ley deben ser diagnosticados en hospitales pero su administración y seguimiento puede realizarse fuera de los mismos” y critica que los criterios que rigen su actual paso sistemático al ámbito hospitalario “es fundamentalmente economicista, y obedece a un supuesto ahorro de costes, si bien sigue sin hacerse pública memoria económica alguna.”

Ahora bien, desde se estima que la farmacoterapia es “muy compleja”, lo que impide a ningún colectivo profesional “ser capaz de dar por sí solo una respuesta completa”, por lo que apuesta por la colaboración interdisciplinar de profesionales sanitarios, y por la coordinación entre niveles asistenciales. No obstante, recuerda que el dossier de la SEFH “es un paso atrás que dificulta el trabajo interniveles del farmacéutico”.