Dolors Marco, directora de Reputación Corporativa de la CUN

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Esther Martín del Campo Madrid | viernes, 16 de febrero de 2018 h |


“Nuestra RSC es muy importante, con proyectos que son un emblema para la CUN”


Pregunta. ¿Qué supone para usted esta nueva responsabilidad dentro de la CUN?

Respuesta. Para mí me supone todo un reto profesional porque, a pesar de tener una trayectoria de muchos años dentro del sector salud, sobre todo en el Hospitalario, es la primera vez que me incorporo a un proyecto de estas características, con un componente docente e investigador tan grande dentro de una institución con una sólida reputación. Hasta ahora, siempre había participado en proyectos que estaban naciendo

P. ¿Es de nueva creación?

R. La Dirección de Reputación Corporativa es de nueva creación y obedece a las nuevas necesidades de posicionamiento del centro con la apertura de la nueva sede de Madrid. Este nuevo proyecto requiere de un enfoque de la gestión de la reputación corporativa desde todos los ámbitos que afectan a la notoriedad de la marca, de manera directa e indirecta (Relaciones Institucionales, RSC, Marketing…).

P. Dentro del departamento de Reputación Corporativa, ¿qué peso específico tiene cada área?

R. En la actualidad el mayor peso lo tiene el área de Comunicación, porque quizá es la que está más desarrollada, en cuanto a estructura y a trayectoria dentro de la clínica. Responsabilidad Social Corporativa es un Departamento muy importante, con proyectos muy emblemáticos para la propia identidad de la clínica, como el programa Niños Contra el Cáncer y otras iniciativas que actualmente lideran distintos departamentos y especialistas. Las Relaciones Institucionales también son clave para la clínica en este momento y –afortunadamente con una base muy sólida– junto con el Marketing, estas tres van a ser áreas muy importantes.

R. ¿Qué lugar ocupa la responsabilidad social corporativa en este contexto?

R. Fundamental, al tratarse la Clínica de una entidad sin ánimo de lucro. Sólo esto ya nos da una idea del firme compromiso de la Clínica Universidad de Navarra y de sus profesionales con la sociedad, y si le añadimos que es el único hospital de España que pertenece a una Universidad y, por lo tanto, con una sólida vocación por generar y compartir conocimiento y por la investigación, nos situamos ante un hospital diferente, con una responsabilidad y un compromiso con la sociedad muy “pegados” a su identidad.

P.¿Qué tipo de iniciativas desarrollan en RSC?

R. A parte del compromiso con la docencia y la investigación, que se traduce tanto en un buen número de ensayos clínicos y de artículos en publicaciones internacionales, Niños Contra el Cáncer es el programa emblemático de la Clínica que tiene como objetivo promover las líneas de investigación en Oncología infantil y ayudar a las familias sin recursos suficientes a acceder a tratamientos específicos. El Programa lleva a cabo diferentes actividades periódicamente para sensibilizar sobre la necesidad de fomentar la investigación en cáncer pediátrico y recaudar fondos. Además de la Carrera de los Valientes que se ha celebrado el pasado fin de semana en Pamplona y de la Gala benéfica que se celebra anualmente, recientemente se presentó el libro “Vivir a pulso”, una iniciativa de la Clínica Universidad de Navarra y Alfaguara que recopila en un volumen 10 historias de superación de pacientes de la clínica contadas por escritores como Juan Manuel de Prada, Soledad Puértolas, Fernando Aramburu, Marta Rivera de la Cruz, Gustavo Martín Garzo, José María Merino, Mercedes Salisachs, Lorenso Silva, Bernardo Atxaga y Luis Mateo Díez. Los ingresos de la venta de este libro se destinarán a la investigación del Cáncer Infantil en el marco de Niños Contra el Cáncer.

P. ¿Por qué es importante gestionar la Reputación Corporativa dentro del sector sanitario?

R. Porque trabajamos con la salud que es algo muy sensible para la sociedad. La principal prueba de este alto nivel de sensibilización es la facilidad con la que se generan alarmas: todos hemos estado enfermos alguna vez y a todos nos da miedo ponernos enfermos. Que las instituciones que velan por nuestra salud tengan un prestigio sólido, una reputación intachable, da mucha confianza al paciente, especialmente cuando se trata de problemas graves de salud. Y, cada vez más, las organizaciones sanitarias son más conscientes de la importancia que tiene, no sólo tener una buena reputación, sino gestionarla adecuadamente en el día a día, para hacerla crecer y acotar los riesgos de erosión.

P. ¿Cuál cree que es el punto fuerte de la Clínica Universidad de Navarra en el campo de la reputación corporativa?

R. Su principal fortaleza es su trayectoria sólida desde su fundación hace 55 años. Ha sido una reputación generada por sí misma, sin estridencias, a partir del valor del trabajo bien hecho por un equipo de profesionales altamente cualificados y comprometidos con el cuidado del paciente y con el fomento del saber y de la investigación. Una reputación basada en hechos, sin grandes campañas de branding, ni claims, ni eslóganes. “Sólo” el aval de una trayectoria de muchos años de trabajo bien hecho por parte de buenos profesionales volcados en el paciente, a cuyo servicio siempre se ha intentado poner los mejores recursos.

P. ¿En qué medida integran la experiencia del paciente en la gestión de la clínica?

R. El paciente es el centro, es el único accionista de la Clínica. Una de las cosas que más me sorprendió cuando me he incorporado es oír a enormes profesionales decir con una sencillez muy llana: “Tenemos que hacer la Medicina que el paciente necesita”. A partir de aquí, cada paciente es único, los profesionales se ponen al servicio de su problema de salud, para intentar darle la mejor solución en el menor tiempo posible, funcionan como un engranaje perfectamente sincronizado y se logra que el paciente se sienta en las mejores manos y se convierte en parte activa de su proceso de tratamiento.

P. ¿Qué expectativas tienen con la apertura del nuevo centro en Madrid?

R. La Clínica viene a Madrid a colaborar con la sanidad de aquí, en la atención clínica y en la investigación. Creemos que nuestro modelo de hospital académico de corte anglosajón, docente e investigador puede aportar valor en una sanidad de altísimo nivel, como la madrileña, en la que tanto los hospitales públicos como los privados están haciendo cosas muy interesantes. Nos ilusiona la acogida que hemos tenido hasta ahora y creemos que podemos aportar a Madrid nuestra experiencia de 56 años en Pamplona y que la sede de Pamplona puede enriquecerse de la experiencia de Madrid.