El esfuerzo realizado por los profesionales del Centro de Salud Los Alpes, en Madrid, en este año de pandemia resulta difícil de ponderar. En los primeros meses, el trabajo era ingente, a la par que invisible para muchos ciudadanos, como ha sucedido en esta crisis sanitaria con el primer nivel asistencial.
Una vez superada la fase crítica, llegó el momento de gestionar la avalancha de pacientes que regresaban en busca de su médico de atención primaria para atender problemas crónicos o dolencias que fueron capaces de replegar durante meses por el miedo a un contagio en el ámbito sanitario.
Con este panorama, en absoluto fácil de gestionar, este centro madrileño ha conseguido destacar por la calidad en la atención que prestan a sus pacientes. Y lo hacen por segundo año en estos premios, la primera vez fue en 2017, aunque desde que irrumpieron en la lista de los Best in Class un año antes han conseguido situarse entre los finalistas en todas las ocasiones.
María Dolores Martín Álvarez, directora del Centro de Salud Los Alpes, explica a GM la manera en la que se ha gestionado en su centro. “Todos los estamentos del equipo del centro de salud, se han implicado mucho para intentar atender la demanda de la población de la forma más eficaz posible”, asegura. En este sentido, añade que “se han dedicado muchas horas extras, acudiendo a trabajar de formar voluntaria sábados y domingos, e incluso festivos, para no dejar desatendida a la población durante la pandemia”.
Atención presencial restablecida
A día de hoy, la atención presencial se ha restablecido por completo y se ofrece consulta telefónica o presencial según la demanda del paciente. Sobre este asunto, Martín Álvarez defiende que “se puede ofrecer una atención de calidad a distancia en determinados procesos, no en todos”. De hecho, una parte de la atención telefónica llegó con la pandemia para quedarse. “Se hizo un gran uso de la consulta telefónica debido a las circunstancias, y actualmente los pacientes lo siguen demandando porque les es más accesible y cómodo en muchas circunstancias”, advierte.
El desafío en este momento pasa por garantizar o facilitar en la medida de lo posible la accesibilidad al paciente. En su caso, la fórmula escogida, según detalla la directora, no es otra que la de “ampliar el número de huecos tanto telefónicos como presenciales en las diferentes agendas y el acceso en las citaciones de los diferentes sistemas alternativos de citación y con un excelente trabajo de los profesionales de la unidad de atención al usuario”.
Con la nueva normalidad, el centro también retoma los trabajos que quedaron pendientes antes de la pandemia, al igual que la docencia del centro y diferentes proyectos asistenciales, “todos ellos encaminados a mejorar la calidad asistencial de los pacientes”, remarca su portavoz.
En esta lista que se está reactivando hay proyectos relacionados con la calidad, como el diseño de las agendas para la orientación de la demanda, o la atención a procesos agudos de demanda en las consultas de enfermería de atención primaria, explica, que están englobados en un proyecto más amplio dirigido por la gerencia de atención primaria.
Implicación en la toma de decisiones
Además, se ha creado un grupo en el que participan profesionales de los distintos estamentos del centro para implicar a todo el equipo en la toma de decisiones que conlleva poner en marcha. Otro de los puntos fuertes de este centro es la implicación de un equipo multidisciplinar en todas las actividades que se emprenden: celadores, auxiliares, equipo de la UAU, matronas, odontóloga, higienista, médicos, pediatras, enfermeras, trabajadora social, etc., narra la portavoz. Durante la pandemia, además, han contado con el apoyo de los Gestores Covid, que siguen presentes allí.
En aras de mejorar la capacidad resolutiva de sus profesionales, casi todos los facultativos de este centro están formados para el manejo del ecógrafo y del dermatoscopio. “Disponemos de dos ecógrafos, uno fijo en el centro y otro portátil para poder dar este servicio en domicilio. También disponemos de dos MAPA (monitorización ambulatoria de presión arterial)”, añade.
Pero quizá lo más destacado es que el centro de salud dispone de una sala de cirugía menor, dotada con bisturí eléctrico y aparataje de crioterapia, con la que se hace diferentes cirugías menores. Asimismo, cuentan con varios profesionales formados con la colocación de implantes anticonceptivos.
Con todos estos atractivos, no es de extrañar que el Centro de Salud Los Alpes sea un reclamo en el proceso de formación de nuevos profesionales sanitarios. En este sentido, Martín Álvarez subraya que disponen de muchos tutores implicados en la formación de estudiantes de Medicina, enfermería, MIR, EIR, y estudiantes del “Programa ESO-Empresa”.
De puertas afuera, y como un valor añadido más, las puertas de Los Alpes están siempre abiertas a la colaboración con institutos, colegios y asociaciones vecinales, con los que colaboran en los diferentes proyectos que dan vida a este centro madrileño.
