Los retos de la sanidad madrileña más allá de la COVID-19

Por Enrique Ruiz Escudero, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid

225

Por Enrique Ruiz Escudero, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid

¿Será el 2022 el año en el que finalice el COVID-19? Ojalá que así sea, pero si algo nos ha enseñado este virus es que nunca se cumplen las predicciones. Lo que sí hemos aprendido es que la gestión para enfrentarnos a él ha tenido que evolucionar, como han evolucionado las características de las diferentes variantes.

Por tanto, nuestras medidas tendrán que adaptarse en 2022 a los retos que el virus nos presente. Ninguna ola ha sido igual a otra, como tampoco lo han sido las medidas a adoptar.

Buen ejemplo ha sido la sexta ola, protagonizada por Ómicron, más contagiosa que sus predecesoras.

Esto obligó a que la Comunidad de Madrid apostara por modificar el protocolo de manejo del contacto estrecho, por organizar en hospitales y centros de salud circuitos específicos para la realización de test de antígenos; y por la distribución gratuita de estos test en las farmacias. Medidas que se han unido a la herramienta más importante y eficaz para enfrentarnos al coronavirus, la vacuna.

Creemos y apostamos por la vacunación. Hemos logrado que el grado de inmunidad en la Comunidad de Madrid sea elevado. Y queremos ampliar este dato, consiguiendo que todo aquel que no se ha vacunado aún, lo haga. Igual que incidimos en la importancia de que la población vulnerable, personas con mayores factores de riesgo, acudan a administrarse la dosis de recuerdo.

Precisamente, esta precisión en la toma de decisiones es lo que define al ‘Modelo Madrid frente al COVID-19’. Un modelo que ha conjugado salud y economía, que ha sido duradero en el tiempo, y que nos ha permitido avanzar como sociedad.

Un modelo con el que la Comunidad de Madrid ha encabezado la gestión del Covid a nivel nacional. Del milagro que fue el Hospital de Ifema surgió la construcción del Hospital Enfermera Isabel Zendal, el mayor centro de pandemias, y que es una perfecta muestra de este liderazgo. Como también, la incorporación de los test de antígenos, las zonas básicas de salud, los planes de elasticidad de los hospitales, el papel clave de la atención primaria y el SUMMA 112, el corredor UCI o la unión de la sanidad pública y privada.

Iniciativas capitaneadas por la presidenta Isabel Díaz Ayuso. Su apoyo y valentía han marcado la diferencia a la hora de gestionar la pandemia. Como lo ha hecho la responsabilidad, experiencia y capacidad de los profesionales del sistema sanitario madrileño, algo que nos está permitiendo superar poco a poco esta crisis.

La atención primaria es vital y en Madrid hemos desarrollado un Plan Integral de Mejora, que contempla incrementar en 200 millones el presupuesto para este ámbito

Un hecho que, a su vez, nos posibilita continuar con toda la actividad no-Covid. En este sentido, los grandes retos de un futuro que ya es presente pasan, en primer lugar, por la Estrategia de Atención Integral del Paciente Post-Covid19, que tiene como fin atender a aquellas personas con síntomas tras superar el virus.

También es un objetivo prioritario la salud mental. Primordial tras el impacto de la pandemia. Por eso, contamos con un nuevo Plan de Salud Mental y Adicciones que pone su énfasis en la atención a niños, jóvenes, y personas en riesgo de exclusión.

 Sin duda, la atención primaria es vital, y en Madrid hemos desarrollado un Plan Integral de Mejora, que contempla incrementar en 200 millones el presupuesto para este ámbito asistencial, que se sitúa en torno a los 2.000 millones. Con este fondo se promoverán nuevos puestos, habrá mejoras salariales, equipamientos más modernos y tecnológicos y, además, se crearán nuevas infraestructuras sanitarias.

En esta línea, disponemos de un Plan de Modernización de Infraestructuras sanitarias que contempla la reforma y mejora de los grandes hospitales madrileños, como son La Paz, el 12 de Octubre o el Hospital Gregorio Marañón. Sin olvidar la puesta en marcha o tramitación de 15 nuevos Centros de Salud en este año 2022; además de remodelaciones en otros 40 centros de salud más.

La Farmacia madrileña va a vivir en 2022 un antes y un después, con la aprobación de una nueva norma, propia del S.XXI, al incorporar las exigencias de ciudadanos y farmacéuticos. Con ella se potencian las funciones de estos profesionales, se reivindica su importancia en la administración del medicamento, y se defiende la necesidad de reforzar la adherencia del paciente al tratamiento.

De la misma manera, estamos centrados en el nuevo Plan de listas de espera, al que vamos a dedicar 65 millones de euros. Y también en potenciar los cribados, la red oncológica, la red de terapias avanzadas, la investigación, la digitalización, la humanización, los cuidados paliativos o la atención a la cronicidad, entre otros retos.

En definitiva, queremos que el paciente tenga soluciones a sus necesidades, para que reciba la mejor atención posible. Para ello, seguiremos trabajando en mantener el liderazgo asistencial, tecnológico e investigador de la Comunidad de Madrid.

A lo que se suma nuestra gran apuesta de orientar los recursos del sistema hacia la salud, en vez de a la enfermedad, apostando firmemente por la prevención.

Un objetivo para el que contamos con todos los agentes de la Sanidad Madrileña.