Gaceta médicA Barcelona | viernes, 17 de febrero de 2017 h |

Un ensayo clínico de vacuna terapéutica contra el VIH ha logrado demostrar, por primera vez, que el sistema inmunitario de las personas con VIH se puede reeducar en algunos casos para ayudarle a controlar el virus durante períodos largos de tiempo sin necesidad de tomar tratamiento antirretroviral. En concreto, 5 de los 13 participantes de un ensayo que ha parado la medicación (38,5 por ciento) controlan el virus desde hace 5, 13, 17, 20 y 27 semanas, respectivamente. El estudio, que continúa en marcha, se lleva a cabo en Barcelona con una vacuna desarrollada por investigadores de la Universidad de Oxford, MVA.HIVconsv, y administrada de forma combinada con un fármaco, romidepsina (Istodax, de Celgene), que se ha demostrado capaz de despertar al virus latente dentro del organismo. El estudio está dirigido por IrsiCaixa y la Fundación Lucha contra el Sida, y se lleva a cabo en el Hospital Universitario Germans Trias i Pujol, el Hospital Clínico-IDIBAPS y el centro comunitario BCN Checkpoint.

Quince pacientes recibieron dos dosis de refuerzo de la vacuna MVA.HIVconsv, seguidas de 3 dosis de romidepsina. La Romidepsina es un quimioterápico utilizado para enfermedades hematológicas, que fue utilizada porque estudios previos habían demostrado que puede revertir la latencia del VIH.

Los participantes en los que se detectó una respuesta inmunitaria favorable a la vacuna fueron invitados a interrumpir el tratamiento y seguir controles semanales. Según los resultados hasta la feca, hay cinco “controladores virémicos” potenciales, ocho pacientes que reiniciaron el tratamiento en cuanto se detectó un rebote viral, una persona que dejará en breve de tomar la medicación y una que no mostró una respuesta inmunitaria favorable tras la vacunación.

Los participantes forman parte de una cohorte de individuos que empezaron a tomar tratamiento durante los primeros 6 meses después de la infección por el VIH (lo que se conoce como “tratamiento precoz”). Los análisis corroboran la importancia de la detección precoz y sugieren que el inicio del tratamiento durante las primeras semanas después de la infección puede contribuir al mantenimiento de una respuesta inmunitaria fuerte y funcional, favoreciendo potencialmente una mejor respuesta a la vacunación. Para la elaboración de esta cohorte se cuenta desde hace más de 3 años con la colaboración del centro comunitario de detección del VIH y otras infecciones de transmisión sexual BCN Checkpoint, que también participa en el ensayo con el seguimiento semanal de los pacientes durante la interrupción del tratamiento, mediante tecnología que permite detectar cualquier rebote viral en menos de 90 minutos.

Cuando se interrumpe el tratamiento antirretroviral, habitualmente el nivel de virus en sangre experimenta un rebote a lo largo de las 4 primeras semanas después de dejar los fármacos. En el caso de estos 5 pacientes, se han observado pequeños repuntes esporádicos de la carga viral, pero que han descendido al poco tiempo. “Es como si se hubiera conseguido por un lado debilitar al virus y por otro reforzar el sistema inmunitario”, explica Beatriz Mothe, de IrsiCaixa y coordinadora del ensayo.