#FORMACIÓN DE FORMADORES

br

M.RIESGO/c.m.lÓPEZ Enviadas esp. a Barcelona | viernes, 11 de octubre de 2019 h |

Hoy sabemos que ha cambiado por completo la manera de enfocar la oncología. Es cierto que este cambio fundamentalmente pivota, para Jesús García-Foncillas, director del Oncohealth Institute de la Fundación Jiménez Díaz y miembro de la Fundación ECO, en un hecho: en lugar de hacer una decisión terapéutica basada en si alguien tiene un cáncer de un determinado órgano, —ya sea cáncer de pulmón, de colon o páncreas— esta decisión estrictamente está en función al perfil genómico del tumor, independientemente de donde esté localizado.

“Evidentemente, este cambio de paradigma requiere de un cambio en la mentalidad de los oncólogos y un cambio en la manera de orientar la atención del paciente oncológico en todas las consultas”.

Hasta ahora, explica, el abordaje del cáncer lo hacen los equipos multidisciplinares y por grupos especializados en cáncer de pulmón, o cáncer ginecológico. Sin embargo, este planteamiento implica una reorganización a la hora de buscar tratamientos, independientemente de dónde esté localizado el tumor, y tratar a un paciente que tiene, por ejemplo, una traslocación ALK o tiene una fusión NTRK. “Lo fundamental, no es para nada dónde está el tumor, sino el perfil molecular”.

En este contexto, a nivel europeo se ha puesto en marcha una iniciativa que lideran varios oncólogos a nivel internacional y la Fundación ECO que consiste en llevar ese cambio de mentalidad a todos los oncólogos, “y desginar a formadores que van a llevar, a su vez, a nuevos pléyades de oncólogos en esta nueva visión de la oncología”.

García-Foncillas explica que el diseño de esta iniciativa cuenta con un planteamiento multidisciplinar, ya que no solo hay oncólogos, también patólogos o biólogos moleculares. “Necesitamos ese trabajo en equipo para analizar todas las alteraciones. Además, el experto apunta a que esa transversalidad exige la necesidad de colaborar todo el personal clínico y de laboratorio para ver cómo hay que gestionar esta nueva manera de enfocar al paciente y analizar también qué pacientes claramente son indiscutibles para beneficiarse de las nuevas terapias.

No se trata, dice García-Foncillas, de una consulta de cáncer de colon o cáncer de pulmón sino que será una consulta dirigida y basada en la genómica del tumor, donde la conexión y el trabajo en equipo ha de asentarse con el resto de profesionales más allá de oncología. “La Fundación ECO es el germen de esta nueva corriente de formar a formadores, hasta que tengamos a toda la comunidad científica oncológica y todas las disciplinas que intervienen en el cáncer formados en este campo”, acota el director del Oncohealth Institute.


Este cambio de paradigma en la oncología requiere de un cambio de mentalidad entre los profesionales