C.M.L | domingo, 02 de junio de 2019 h |

Keytruda (pembrolizumab), de MSD, ha sido uno de los protagonistas de la primera jornada de Reunión Anual de ASCO en Chicago, con la presentación de avances para cáncer de pulmón y gástrico.

Por un lado, la compañía presentó datos a cinco años del ensayo clínico KEYNOTE-001, de fase Ib, que muestran que pembrolizumab fue seguro y efectivo y que aumentó sustancialmente la supervivencia general en cáncer de pulmón no microcítico avanzado (aNSCLC). En concreto, el 23.2 por ciento de las personas que no habían sido tratadas previamente con quimioterapia y el 15.5 por ciento de los pacientes tratados previamente estaban vivos después de cinco años, con el mayor beneficio observado en pacientes con mayor expresión de PD-L1. Esto representa una mejora marcada en los índices de supervivencia a los 5 años de la era previa a la inmunoterapia, con un promedio del 5.5 por ciento para el aNSCLC. Este es el estudio de seguimiento más largo hasta la fecha de las personas con aNSCLC tratadas con pembrolizumab, según los investigadores.

“El pronóstico uniformemente negativo que se ha asociado con el diagnóstico de cáncer de pulmón no microcítico avanzado ya no es apropiado”, aseguró el autor principal del estudio, Edward B. Garon, profesor asociado de Medicina en UCLA, Los Ángeles. “El hecho de que tengamos pacientes en este ensayo que aún estén vivos después de siete años es bastante notable. También tenemos evidencia de que la mayoría de los pacientes que se encuentran bien después de dos años con pembrolizumab viven por cinco años o más”.

Por otro lado se presentaron datos del ensayo clínico aleatorizado de fase III KEYNOTE-062. Este estudio alcanzó su punto final primario, mostrando que para los pacientes con cáncer de la unión gástrica o gastroesofágica avanzada (G / GEJ) con PD-L1-positivo, HER2-negativo, el tratamiento inicial con pembrolizumab resultó en una supervivencia general comparable (no inferior) a quimioterapia estándar. Además, pembrolizumab mostró una mejora clínicamente significativa en la supervivencia general entre los pacientes con tumores que tenían niveles altos de expresión de PD-L1. A los dos años, el 39 por ciento de los pacientes (todos los que tenían niveles altos de PD-L1) que recibieron pembrolizumab estaban vivos, en comparación con el 22 por ciento de las personas que recibieron quimioterapia estándar. El ensayo también evaluó el tratamiento combinado con pembrolizumab y quimioterapia estándar, pero encontró que este régimen no mejoró la supervivencia en comparación con la quimioterapia sola.

“Este ensayo muestra que pembrolizumab de primera línea es eficaz y podría brindar una nueva oportunidad para las personas recién diagnosticadas con cánceres de unión gástrica o gastroesofágica avanzada”, dijo el autor principal del estudio, Josep Tabernero, jefe del Departamento de Oncología Médica del Vall Hospital d’Hebron de Barcelona. “Sigue habiendo una importante necesidad no satisfecha de tratamientos para estos cánceres y nuestros resultados refuerzan la importancia de la investigación continua en este campo”, puntualizó.