GM Barcelona | miércoles, 22 de febrero de 2017 h |

Las pacientes tratadas con olaparib presentan una mejoría clínica estadísticamente significativa en supervivencia libre de progresión (SLP) frente a aquellas que recibieron quimioterapia (capecitabina, vinorelbina o eribulina). Así lo indican los resultados del estudio fase III Olympiad que compara la administración de olaparib (Lynparza, de AstraZeneca) en comprimidos de 300 mg dos veces al día frente a la quimioterapia estándar en el tratamiento de pacientes con cáncer de mama metastásico HER2 negativo con mutaciones en los genes BRCA1 o BRCA2 en línea germinal.

“Estos resultados son buenas noticias para las pacientes con cáncer de mama metastásico con mutaciones BRCA, una enfermedad con una gran necesidad no cubierta”, afirmó Sean Bohen, Vicepresidente Ejecutivo de Desarrollo Global de Medicamentos y Director Médico de AstraZeneca. “Estos son los primeros datos positivos con un inhibidor del PARP más allá del cáncer de ovario, lo que es muy alentador para el desarrollo de nuestro portfolio, ya que estamos centrados en tratar distintos tipos de cáncer actuando sobre las vías de reparación del ADN dañado”, añadió. Los primeros datos del estudio indican que el perfil de seguridad de olaparib está en línea con el de estudios anteriores.