J. A. R. Env. esp. a Washington | viernes, 24 de marzo de 2017 h |

El manejo de los pacientes que sufren síndrome coronario agudo (SCA) y pasan a estabilizarse se benefició del descubrimiento de la eficacia del ácido acetilsalicílico para prevenir nuevos eventos. Aun así, hay pacientes que no están suficientemente bien controlados. En este sentido, la aparición de los nuevos anticoagulantes de acción directa (NACO) puede suponer una buena alternativa terapéutica. Pero una de las mayores preocupaciones que surgen con estos fármacos tiene que ver con el riesgo de sangrado.

En el estudio fase 2 Gemini-Acs-1 se ha observado que el NACO rivaroxaban (Xarelto, de Bayer) no aumenta el riesgo de complicaciones relacionadas con el sangrado si se añade a clopidogrel o ticagrelor en el síndrome coronario agudo. Como señaló Magnus Ohman, líder del estudio, “aunque el tratamiento estándar actual en estos pacientes es la aspirina, muchos pacientes tienen otro evento”. Se estima que uno de cada diez pacientes sufre una recurrencia. Ohman puso el énfasis en que este estudio es el primero en mostrar que emplear rivaroxaban en lugar de ácido acetilsalicílico es eficaz y seguro si se administra como terapia dual con un antiplaquetario. En este trabajo con 3.703 pacientes, el 5,3 por ciento de los que recibieron rivaroxaban y el 4,9 pacientes de los que recibieron aspirina sufrieron sangrado (sobre todo, sangrado nasal). “Una diferencia no significativa”, como indicó Ohman.

En opinión de Carlos Escobar, presidente de la Sección de Cardiología Clínica de la Sociedad Española de Cardiología, lo más destacable de este estudio son los resultados que aporta sobre seguridad. Asimismo, añadió que “a día de hoy está todavía por perfilar qué tipo de pacientes se pueden beneficiar de este fármaco, pero, con estos resultados, podrían ser aquellos alérgicos a la aspirina o que con doble antiagregación han sufrido otro evento cardiovascular”. Hay que tener en cuenta, añadió este experto, que los pacientes que sobreviven a un síndrome coronario agudo se estabilizan pero van a necesitar medicación. Ohman enfatizó que definir cuál es la mejor terapia antitrombótica en los pacientes que están “en transición entre el SCA y la cronicidad exige todavía más investigación”.