El mieloma múltiple (MM) es una de las enfermedades oncológicas en cuyo tratamiento más se ha avanzado en los últimos años. Lo explica a GACETA MÉDICA Enrique Ocio, jefe del Servicio de Hematología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, que recuerda que en lo que va de siglo las agencias reguladoras han dado luz verde a más de una quincena de fármacos. Un panorama que, remarca, “hace que cambie radicalmente la forma en la que tratamos a estos pacientes, así como la supervivencia, y por su puesto, la calidad de vida, que es mucho mejor”.

Además, el experto matiza que los pacientes están siendo diagnosticados antes, lo que resulta “muy positivo”. “Somos capaces de identificar mejor sus factores de riesgo y, lo más importante, tratamos de buscar el mejor tratamiento para cada paciente”, indica. No hay que olvidar, por otra parte, que “la enfermedad tiene un gran impacto en la calidad de vida del paciente porque produce lesiones en los huesos, anemia, insuficiencia renal… de ahí lo esencial de tratarles cuanto antes”, advierte.

El arsenal terapéutico actual, indica Ocio, permite proporcionar un tratamiento muy eficaz ya en primera línea, con o sin trasplante autólogo de médula ósea. “En primera línea podemos alcanzar respuestas muy profundas en las que más de la mitad de los pacientes pueden llegar a una remisión completa inmunofenotípica o molecular, que implica que no somos capaces de detectar la enfermedad con técnicas de muy elevada sensibilidad”, detalla el hematólogo.

“Tratamos de buscar el mejor tratamiento para cada paciente”

Enrique Ocio, jefe del Servicio de Hematología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla

Otro aspecto fundamental es que en el momento de las recaídas hay alternativas de tratamiento muy eficaces, “con fármacos nuevos que están rescatando pacientes que han recibido la mayoría de los aprobados y consiguen de nuevo respuestas profundas”, según Ocio.

Inmunoterapia

La revolución más reciente ha llegado de la mano de la inmunoterapia. Para Enrique Ocio, en este terreno hay dos referentes fundamentales, los anticuerpos biespecíficos y las terapias CAR-T.

En el primer grupo, teclistamab se dirige a dos dianas terapéuticas, BCMA y CD3, ya está aprobado para su uso en Europa y será, posiblemente, “la siguiente revolución“. Otro fármaco de referencia, talquetamab, se dirige a la diana GPRC5D. Con este tipo de fármacos se alcanza una respuesta en más de un 60 por ciento de los casos, apunta.

Con respecto a las CAR-T, una de las dos aprobadas en mieloma múltiple en Europa es cilta-cel, y ha sido desarrollada por Janssen. “En CAR-T nos encontramos por encima del 80 por ciento de respuesta, y estamos evaluando cuál es su duración”, indica, “aunque parece que en muchos pacientes es superior al año e incluso varios siguen en respuesta años tras la infusión de las células”, concluye el especialista.