La Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME), contando con las Sociedades Médicas que la componen, ha publicado ya seis documentos de recomendaciones para la vacunación frente a la COVID-19.

Los nuevos documentos de recomendaciones abordan la vacunación frente a la COVID-19 en pacientes con cáncer, inmunosuprimidos, niños y adolescentes y mujeres durante la lactancia, que pueden consultarse a través de este enlace. Asimismo, y de forma previa, durante el mes de diciembre ya se desarrollaron tres documentos de recomendaciones dirigidos a los siguientes grupos poblacionales: pacientes anticoagulados o con trastornos de la coagulación, pacientes alérgicos y embarazadas.

FACME, asegurando la colaboración y consenso de las sociedades científico-médicas que la constituyen, ha adquirido el compromiso de generar recomendaciones acerca de la vacunación de determinados grupos que podrían considerarse de riesgo o de condiciones especiales, con el fin de que los facultativos dispongan de información protocolizada y apoyada en la mayor evidencia científica a la hora de aconsejar la inmunización frente a la COVID-19. Este trabajo se desarrolla en el seno del Grupo de Vacunación del Consejo Asesor de FACME contando en cada caso con las sociedades miembro con mayor conocimiento en el tema.

Durante la pandemia, el trabajo de las sociedades científicas y su puesta a disposición de las administraciones está siendo una constante, ya que desde FACME y desde sus sociedades miembro se suscribe la puesta en común de la evidencia científica y de los criterios técnicos como garantía para lograr los mejores resultados y evitar divergencias de criterio que generan confusión en los profesionales y en la sociedad en general. FACME está trabajando con sus sociedades en esos aspectos de menor conocimiento de la vacunación frente a COVID-19 con el fin de poder dar el soporte necesario a los profesionales de cara a sus recomendaciones a los pacientes.

Asimismo, el Consejo Asesor COVID de FACME se ha preparado, incorporando a expertos de todas las sociedades médicas, para evaluar con rigor las sospechas de reacciones adversas que vayan apareciendo, en colaboración con la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, para seguir manteniendo la máxima efectividad y seguridad posibles en el proceso de vacunación.