Nieves Sebastián Enviada especial a Bruselas | viernes, 07 de diciembre de 2018 h |

The Economist Intelligence Unit (EUI) está elaborando un estudio para analizar los problemas y desafíos que presenta actualmente el cáncer de pulmón, una patología que según la OMS acabará con la vida de 387.000 pacientes en 2018.

Alan Lovell, Senior Associate, Health Policy and Clinical Evidence en esta agencia, explicó en el marco del Foro Europeo del Cáncer, celebrado en Bruselas e impulsado por MSD, que a veces el foco sale del cáncer de pulmón, y no debería ser así puesto que acapara un 15 por ciento del total del gasto en cáncer. El analista apuntó al tabaquismo como una de las causas principales del desarrollo de esta enfermedad, estando relacionado de alguna manera con alrededor del 85 por ciento de los casos.

España, en posición media

El informe elaborado por la EUI ha analizado la situación en trece países de la Unión Europea. Lovell explicó durante este encuentro que todavía no han terminado el estudio, que ahora cuentan con resultados preliminares y tienen que centrarse en los datos obtenidos en cada país para poder obtener una radiografía exhaustiva de los participantes.

Aun así, llama la atención la gran desigualdad que hay entre los diferentes territorios; en términos de supervivencia a cinco años, España se encuentra en una posición media entre los trece, comparativa liderada por Francia, Alemania y Suecia y con Rumanía a la cola.

Lovell destacó que al estudiar los diferentes países, sí que se ha concluido que el cáncer de pulmón se establece como una de las prioridades de las agendas sanitarias, pero por ejemplo, únicamente Suecia y Polonia cuentan con una sección dentro de sus planes nacionales de cáncer dedicada a esta especialidad. En cuanto a los tratamientos, todavía se está observando el impacto de los tratamientos innovadores, y su reembolso en el sistema, así como el uso que se está haciendo de la medición de biomarcadores para certificar si se está aplicando la medicina personalizada.

La monitorización fue otro de los conceptos que apareció varias veces en la reunión, y en el informe se refleja que sólo la mitad de los países participantes (Bélgica, Francia, Holanda, Reino Unido, Polonia y España) están implicados en la realización de ensayos clínicos para dilucidar cómo podría introducirse en los sistemas públicos de salud.

En definitiva, los expertos reunidos en Bruselas abogaron por impulsar nuevas políticas que promuevan la prevención y desarrollar nuevos tratamientos para mejorar la situación en Europa.