| jueves, 21 de junio de 2018 h |

La exploración mediante eco-doppler mejora la indicación de dónde debe ubicarse el acceso vascular para hemodiálisis, posibilitando así mayor permeabilidad vascular y disminuyendo el número de intervenciones complementarias, según ha puesto de manifiesto un estudio realizado por especialistas en Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Parc de Salut Mar de Barcelona.

Para la realización de este estudio se seleccionó una cohorte prospectiva de pacientes a los que se iba a realizar un primer acceso vascular entre junio de 2014 y julio de 2017, y a los que se les hizo una valoración mediante eco-doppler de la configuración arterial y venoso de ambas extremidades superiores.

La indicación del tipo de acceso vascular se tomó en función de la información obtenida y los resultados se compararon con una cohorte histórica, realizada entre enero de 2012 y mayo de 2014, de accesos vasculares indicados exclusivamente mediante valoración clínica.

Asimismo, se compararon 86 accesos vasculares del grupo de valoración clínica con 92 de ecográfica, observando que la permeabilidad primaria (valoración clínica frente a ecografía) a un año fue del 59,5 frente al 71,9 por ciento, mientras que a los dos años fue de 53,1 frente.

Ahora bien, la permeabilidad asistida sí fue estadísticamente más significativa, siendo a un año 63,2 por ciento en valoración clínica y del 80,7 por ciento en eco-doppler, mientras que a los dos años fue de 58,1 por ciento frente al 70,2 por ciento.

Bien por falta de permeabilidad o utilidad del acceso practicado, tras la intervención inicial, requirieron a los seis meses de un nuevo acceso vascular un 26,7 por ciento de los pacientes sometidos a valoración clínica y un 7,6 por ciento de los que fueron sometidos a ecografía. Finalmente, se realizaron una media de 1,39 intervenciones para conseguir un acceso vascular útil en el grupo de valoración clínica, y 1,08 en ecografía.