GM Madrid | miércoles, 22 de marzo de 2017 h |

El uso de la braquiterapia en un determinado grupo de pacientes de cáncer de mama acorta el tiempo de tratamiento y reduce los efectos secundarios, logrando los mismos niveles de curación y de supervivencia que la radioterapia tradicional, según un estudio europeo publicado por la revista ‘The Lancet’.

En el estudio han participado 1.184 pacientes de siete países diferentes y 16 centros hospitalarios, entre los que está el Instituto Catalán de Oncología (ICO), que ha presentado este miércoles los resultados del trabajo.

Del total de pacientes, 551 fueron tratadas diariamente con el sistema de radioterapia externa tradicional durante siete semanas y 633 lo fueron con braquiterapia y el estudio evidencia que al cabo de cinco años no hay diferencias significativas entre ambos tratamientos en lo que se refiere al número de recaídas ni al índice de supervivencia de las pacientes, sin embargo las mujeres tratadas .

El tratamiento con braquiterapia, que dura cuatro días, consiste en la colocación de una fuente radioactiva dentro o en la proximidad del tumor para destruir las células malignas y, tras los resultados del estudio a nivel europeo, podría ser el tratamiento estándar para un determinado grupo de pacientes con cáncer de mama, según el ICO.

Sin embargo, las mujeres tratadas con braquiterapia estuvieron menos tiempo expuestas a las radiaciones y tuvieron menos toxicidad en la piel.

El jefe del Servicio de Oncología Radioterápica del ICO, Ferran Guedea, explicó que la braquiterapia en cáncer de mama “se ofrece a pacientes mayores de 50 años, con un tumor que crece lentamente y de tres centímetros de diámetro máximo, sin ganglios afectados, con márgenes de resección negativos y con receptores hormonales positivos, lo que equivale al 10 por ciento del total de pacientes”.

Por su parte, la jefa de la Unidad de Braquiterapia del ICO, Cristina Gutiérrez, destacó que esta técnica “tiene la ventaja de que se irradia sólo la zona donde estaba el tumor tras extirparlo, de forma que casi no llegan dosis de radiación ni al corazón, ni a la piel, ni a las costillas, ni a los pulmones”.

El Instituto Catalán de Oncología de L’Hospitalet, que en 2016 realizó más de 300 tratamientos de braquiterapia en pacientes con cáncer de mama, es el único centro de Cataluña que actualmente utiliza esta técnica para este tipo de tumor.