Las compañías GSK y Vir Biotechnology han anunciado una actualización para bioRxiv, servidor de preprints, con datos preclínicos que demuestran que sotrovimab, anticuerpo monoclonal en investigación para COVID-19 mantiene su actividad contra mutaciones clave de la nueva variante Omicron del SARS-CoV-2 (B.1.1.529), incluidas las encontradas en el sitio de unión de sotrovimab. Los datos se han generado a través de pruebas del pseudovirus, testando las mutaciones específicas individuales encontradas en Omicron. Hasta el momento, sotrovimab ha mostrado actividad contra todas las variantes de preocupación e interés definidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Ambas organizaciones están ahora completando las pruebas de pseudovirus in vitro para confirmar la actividad neutralizante de sotrovimab contra la combinación de todas las mutaciones de Omicron con la intención de proveer una actualización a finales de 2021.
En palabras de George Scangos, chief executive officer de Vir, “sotrovimab fue diseñado de manera intencionada teniendo en cuenta la probabilidad de que el virus mutara. Al dirigirse a una región altamente conservada de la proteína spyke que es menos probable que mute con el tiempo, esperábamos dirigirnos tanto al virus actual del SARS-CoV-2 como a las futuras variantes que preveíamos que iban a ser inevitables. Esta hipótesis se ha confirmado una y otra vez, con su capacidad continua de mantener la actividad contra todas las variantes de preocupación e interés probadas hasta la fecha, incluidas las mutaciones clave encontradas
en Omicron, como demuestran los datos preclínicos. Confiamos que esta tendencia positiva continúe y estamos trabajando rápidamente para confirmar esta actividad contra la secuencia combinada completa de Ómicron”.
Por su parte, Hal Barron, chief scientific officer and president R&D de GSK afirma que “desde el inicio de la pandemia, hemos estado trabajando con Vir para combinar nuestra experiencia científica y tecnológica para desarrollar una opción de tratamiento duradera para pacientes con COVID-19. Aunque es una fase inicial, estos datos preclínicos respaldan la opinión que hemos
mantenido sobre el potencial de sotrovimab para mantener su actividad a medida que el virus continúa mutando. Nos alegra que esta opción de tratamiento esté disponible para pacientes en Estados Unidos y en muchos otros países, y estamos trabajando para ampliar el acceso en todo el mundo”.