La asociación de ocho polimorfismos genéticos (SNP) y una variable clínica, la edad, permite evaluar el pronóstico de progresión de un paciente con artrosis primaria de rodilla. Un modelo estadístico que acaba de ser publicado en la revista Rheumatology, pero que ya ha sido presentado en diferentes foros —los congresos español, europeo y americano de reumatología—. La buena noticia es que ya existe un test creado a partir de este modelo estadístico con utilidad en la práctica clínica, ya que permite clasificar a los pacientes según su dolencia vaya a progresar rápida o lentamente.
“Hemos definido progresión lenta o rápida en función de si, en ocho años, este paciente va a necesitar una prótesis de rodilla”, explica Francisco J. Blanco, reumatólogo del Instituto de Investigación Biomédica de A Coruña (INBIC) y uno de los investigadores principales de este ensayo clínico.
Para la puesta en marcha del estudio, Blanco recuerda que lo primero que hicieron fue una “revisión bibliográfica de todo lo publicado en la literatura sobre polimorfismos genéticos asociados al diagnóstico y pronóstico de artrosis de rodilla, cadera, manos e incluso de osteoporosis, todas ellas enfermedades asociadas al envejecimiento”. Una vez recopilada esta información, Blanco y el resto de investigadores comprobaron sus hipótesis en un total de 282 pacientes con artrosis primaria de rodilla de 31 centros sanitarios españoles.
Del análisis de datos de este estudio multicéntrico de cuatro años de duración fue de donde finalmente estos investigadores obtuvieron los ocho SNP (rs2073508, rs10845493, rs2206593, rs10519263, rs874692, rs7342880, rs780094 y rs12009) que, posteriormente, han sido “incorporados” al test. Concretamente, estos ocho polimorfismos explican el 78 por ciento de la capacidad predictiva de la herramienta; el 22 por ciento restante se explica por la variable clínica, la edad —cuanto mayor es el paciente, más rápida es la progresión de la artrosis—. Además, la investigación también halló una asociación directa entre el gen GCKR2 y la progresión de diabetes, al mismo tiempo que confirmó la relación entre artrosis y diabetes, ya que uno de los SNP obtenidos, el rs780094, está relacionado con un riesgo elevado de diabetes tipo 2.
En cuanto a la principal utilidad del test, cuyos resultados se obtienen a partir de una muestra de saliva, Blanco cree que es la adherencia terapéutica. “Con un instrumento así, los pacientes se toman más en serio las recomendaciones de los profesionales”, destaca.