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Por cada paciente diagnosticado precozmente se evita la transmisión del VIH a tres personas. No es la primera vez que los expertos remarcan esta afirmación, pero lo cierto es que en España el 46 por ciento de las 4.000 nuevas infecciones que se producen cada año se diagnostican de forma tardía. Es uno de los datos del ‘Documento de conclusiones’ que la Plataforma VIH España presenta en el marco del Congreso de Gesida y en los días previos a la celebración del Día Mundial del VIH, en el que recogen todo lo tratado durante la última Reunión VIH 2012.
En relación con estas cifras, Josep María Gatell, Jefe del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínic de Barcelona y Coordinador de la Plataforma VIH en España considera que ‘el diagnóstico tardío se asocia con una peor respuesta al tratamiento, mayores gastos sanitarios y un aumento de las tasas de transmisión’.
Por otra parte, una de las principales conclusiones de la reunión señala que el desconocimiento es el principal motor de expansión del VIH. Según datos de la Plataforma, un 30 por ciento de los infectados desconoce que lo están. En Europa, según apuntó Jens Lundgren, fundador del proyecto HIV in Europe, “entre 700.000 y 900.000 personas están infectadas con el VIH y aún no se han diagnosticado. Este hecho arrastra una serie de consecuencias negativas como el inicio tardío del tratamiento y un incremento en el riesgo de transmisión a otras personas”.
Las recomendaciones del NICE que proponen incrementar el número de test en áreas de alta prevalencia y grupos de riesgo, ante la existencia de enfermedades indicadoras, y trabajar en las barreras que existen en los pacientes y en los profesionales sanitarios.
Para ello, los expertos proponen diversificar las vías de acceso a la prueba y señalan que el tratamiento mejora el pronóstico de los pacientes y es una medida extraordinaria para prevenir la transmisión del VIH porque reduce la carga viral, incluso ha modificado el abordaje en muchos casos.
Los últimos estudios de evaluación económica destacan el coste-eficacia de un diagnóstico precoz. Según un estudio realizado en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid a cargo del jefe de Servicio de Enfermedades Infecciosas, Santiago Moreno, se concluye que el ahorro económico medio en medicamentos e ingresos hospitalarios de un paciente diagnosticado precozmente con VIH se estima en 1.000 euros al mes y puede superar los 5.000 euros mensuales si el paciente se diagnostica inicialmente de Sida.