br
La presidenta del Colegio de Médicos de Madrid (Icomem), Sonia López Arribas, no tendrá que personarse a declarar definitivamente en el Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid por la denuncia del compromisario y ex presidente de la Organización Médica Colegial (OMC) Guillermo Sierra.
El pasado 9 de septiembre, el juzgado decidió su archivo y el sobreseimiento libre de la denuncia que Sierra interpuso contra López Arribas por corrupción entre particulares, una decisión que comunicó a las partes el 11 de septiembre. Según ha explicado el Icomem, el juez ha considerado que el hecho denunciado por el compromisario no es delito. “El sobreseimiento libre, a diferencia del provisional que equivale a un archivo temporal de la causa, significa que el Juez estima que el hecho denunciado no está considerado delito”, ha señalado la institución colegial en un comunicado.
El magistrado argumenta en el auto que comunicó a las partes el pasado 11 de septiembre que Sierra ocultó de manera deliberada que la Asamblea de Compromisarios el 19 de marzo había aprobado las cuentas y la liquidación presupuestaria de 2012, y que en esas cuentas, se incluía la partida de la retribución del que fue director general colegio, Antonio Mora Cepero, y que en la actualidad ocupa el cargo de asesor de la Junta Directiva, cargo que contempla entre las principales funciones la coordinación interdepartamental de la institución.
“El auto de archivo expresamente recoge que en la denuncia, que fue presentada ante los Juzgados de instrucción posteriormente a la Asamblea de Compromisarios de marzo de 2013, se omitió el hecho trascendental de que las cuentas fueron aprobadas por dicho órgano colegial”, reza la nota del colegio madrileño.
El juez había admitido a trámite esta denuncia y había citado a declarar a López Arribas el próximo 17 de octubre. Después de que el magistrado conociera la aprobación de las cuentas y que estaba especificado el salario de Mora, decidió archivar la causa, por lo que López Arribas no deberá presentarse a declarar como había manifestado esta publicación en su edición del 16 de septiembre.
El pasado marzo, la Asamblea de Compromisarios aprobó las cuentas con 56 votos a favor, 35 en contra y 3 abstenciones.
Después de una serie reajustes de personal y de otras partidas presupuestarias, el colegio presentó un incremento de los ingresos del 10 por ciento (734.117 euros) en los resultados de 2012, que compensaron el crecimiento del nueve por ciento de los gastos (649.952 euros) del total presupuesto (7.478.900 euros), lo que ha resultado, según el organismo colegial, en un superávit de 84.165 euros. La institución aclaró que los gatos se habían disparado por el pago de las indemnizaciones a los trabajadores despedidos.