Recortes/ Cantabria no hará una política de RRHH basada en un dinero que no tiene

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Los consejeros piden la comprensión de los sindicatos, reacios a más concesiones

La carrera profesional, más difícil todavía en Castilla-La Mancha o Baleares

| 2011-09-23T16:53:00+02:00 h |

E.M.C.

Madrid

“El Gobierno no va a poder hacer política de recursos humanos a base de dinero porque no tiene”. Esta frase pertenece a la consejera de Sanidad y Servicios Sociales de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, que presidió la semana pasada la Mesa Sectorial del Personal de las Instituciones Sanitarias, pero, en realidad, podría haberse pronunciado en cualquier contexto y comunidad autónoma.

Eso sí, la consejera cántabra asegura que la falta de fondos, que se arrastrará en la primera mitad de la legislatura, no impedirá que se produzcan avances y mejoras en las condiciones laborales de los trabajadores del Servicio Cántabro de Salud. Un encaje difícil que exige esfuerzo y algo más que buena voluntad política.

Tras la presentación de las directrices en materia de sanidad en los diferentes parlamentos regionales, las últimas en la Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana y Extremadura, donde la consejera de Salud y Política Social, María Jerónima Sayagués, ha vuelto a lanzar la idea del pacto por la sanidad y ha anunciado que prevé instaurar la libre elección de médico, los responsables políticos intensifican sus contactos con los representantes de los trabajadores sanitarios.

En Cantabria, la consejera presidía la semana pasada la constitución de la mesa sectorial, después de tres meses de espera. Los resultados obtenidos en el Hospital de Laredo por el Sindicato Médico de Cantabria, que acudió a las elecciones sindicales sin Satse, dejaron a CESM-Cantabria fuera de este espacio de negociación, en el que sí están representados CC.OO. CSIF, Satse, ATI y UGT.

Sáenz de Buruaga aseguró que pretende dejar atrás una política de recursos humanos “salpicada por la conflictividad permanente, oscurecida por la falta de diálogo y transparencia y viciada por los incumplimientos y la desconfianza” y se comprometió, según fuentes de CC.OO., a constituir dos mesas de negociación en los próximos 15 días.

La consejera ha pedido a las organizaciones sindicales que pongan encima de la mesa sus aportaciones al Plan Integral de Reducción de las Listas de Espera, que espera tener listo en seis meses. Desde CESM-Cantabria, su presidente, Francisco Javier Santiuste, entiende la preocupación de Buruaga por rebajar y organizar las listas de espera, objetivo al que se estaba destinando un estimable presupuesto, y asegura que realizar cirugía por las tardes, como propuso, es una medida “popular y lógica”, aunque insiste en las dificultades para hacerlo bien y conseguir que la medida sea eficaz. Para ello, reclama que tenga en cuenta la colaboración de los profesionales, y reconoce que ha habido conversaciones, a medio camino entre la mesa de trabajo y el comentario informal, y que cuentan con la promesa de que se mantendrán e intensificarán según se vayan concretando medidas.

“Este sindicato está ya muy ‘escamado’ con las declaraciones de intenciones de los titulares que han pasado por la consejería, pero nos toca ser optimistas para no deprimirnos”, asegura en declaraciones a GACETA MÉDICA.

El panorama no es mejor comunidades como Baleares, que el viernes pasado aprobó en Consejo de Gobierno la eliminación de los 89 liberados sindicales institucionales decretada por el presidente de la comunidad, con quien ha solicitado reunirse el sindicato médico de la región, Simebal. Al cierre de esta edición, el sindicato está a la espera de conocer el texto definitivo para determinar las actuaciones que seguirán ante lo que consideran un atropello a la libertad sindical, “la peor agresión a un derecho constitucional”. La organización contempla “la mayor beligerancia legal” posible.

Pocos días antes, el secretario general de Ibsalut, Cecilio García, se reunía con la Junta de Personal del sindicato. García aseguró que el objetivo prioritario del servicio de salud es garantizar el cobro de las nóminas en lo que queda de año, así como el compromiso de evitar eres sanitarios. IbSalut también reconoció la deuda de la productividad variable de 2010, que se pagará en 2012 a todos los facultativos y se acordó que CesmSatse participará en los grupos de trabajo para negociación de la carrera profesional.

En Castilla-La Mancha, el sindicato médico también tiene en este punto uno de sus principales caballos de batalla con el nuevo gobierno popular. Según el sindicato médico, en la última reunión mantenida a mediados de septiembre entre el secretario general de CESM-Castilla-La Mancha, José Luis Grau, y el director gerente del Sescam, Luis Carretero, se apuntó que la consejería tiene intención de congelar el pago de los nuevos grados de carrera profesional que consoliden los facultativos. Los grados alcanzados no serán retribuidos hasta que la administración regional considere que la situación económica lo permite y sin efecto retroactivo, denuncia el sindicato, que cree que la decisión causará malestar entre los facultativos y repercutirá en la calidad.

No obstante, el representante sindical reconoce que sí ha recibido la garantía de la administración de que antes de final de año los profesionales cobrarán la productividad variable correspondiente a 2010, de la misma manera que se negociará con la formación los criterios que se regirán para el cobro de incentivos de este año.