La pasividad de Sanidad ante la regularización de los médicos especialistas sin título oficial ha puesto en jaque al coletivo de mestos. A pesar de que el ministerio insiste en que son pocos los profesionales que quedan en esta situación y, por tanto, no es necesario abrir un nuevo procedimiento similar al de Italia.
Sin embargo, los sindicatos han decidido no silenciar el asunto. Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) critican la negativa de Sanidad a regularizar la situación a estos profesionales. UGT y CC.OO. también preparan sus estrategias para ayudar a este colectivo y exigir una actuación del ministerio. Por su parte, los grupos políticos también han puesto las cartas sobre la mesa. La primera fue Conxita Tarruela, portavoz de CiU en el Congreso, con una PNL que exige seguir el ejemplo italiano.
Pero la falta de un resgistro de profesionales induce a confusión en cuanto a la cifra de afectados. Las estimaciones oscilan entre los 400 y los 2.000 profesionales sin regularizar.
Aunque más allá de la cifra, a estos profesionales lo que les preocupa es el agravio comparativo que se les está haciendo con respecto a los colegas italianos. A pesar de la pasividad, aún quedan dudas sobre la legalidad del proceso de evaluación de hace unos años.
En España ya se han promulgado dos RD para regularizar a estos profesionales. Los dos más conocidos fueron en 1994 y 1999, cuando se publicaron dos leyes que fueron un intento, para muchos insuficiente, por solucionar la cuestión. Desde UGT aseguran que el último, establecía una vía excepcional de acceso al título de especialista aunque “no alcanzó su objetivo porque se emplearon supuestas irregularidades en el proceso de certificación por parte del tribunal”, comenta Pilar Navarro, secretaria del sector salud de la FSP-UGT.
Irregularidades
Precisamente, Juan José Pérez fue uno de los afectados durante la última convocatoria. Ante estas irregularidades, presentó junto a otros compañeros una querella criminal por un presunto delito de prevaricación a los miembros del tribunal en Agosto de 2001. En la misma, los profesionales denunciaban “irregularidades en el proceso de acceso al no respetarse la homogeneidad en la evaluación en relación con otras especialidades”, comenta. En este sentido, alegaron que existía “una estrecha relación laboral de algunos aspirantes y algunos miembros del tribunal, que se había vulnerado de forma flagrante la confidencialidad en el proceso de evaluación y la posterior corrección del examen”, constata la sentencia.
Los intentos “fallidos” por hablar con los diferentes grupos políticos se han repetido a lo largo de estos años. Pérez destaca que el denominador común ha sido la indiferencia y “el mirar hacia otro lado” por parte de las agrupaciones. Tras más de diez años desde que presentaron el contencioso, el especialista no descarta reactivar la vía penal. No sería la primera vez que insiste en reavivar su lucha ya que hace años quisieron llevar el caso al tribunal de Estrasburgo, aunque lo desestimaron por el alto coste que les supondría.
En definitiva, una situación que se prolonga a lo largo del tiempo, y que sobre todo marcó un punto de inflexión en dos especialidades, Alergología y Otorrinolaringología. En la actualidad, estos profesionales se dedican, en el mejor de los casos, a atención continuada o Atención Primaria, como es el caso de Pérez, “muchos otros están en paro”, advierte.