Carmen M. López Madrid | viernes, 16 de enero de 2015 h |

Ni siembra vientos ni recoge tempestades, aunque a veces se mete en berenjenales. Hace su trabajo con precisión, con pico y pala, como ara su tierra. El huerto de Fernando es plural como su vida, y aunque en el plano sindical no siempre recoja sus frutos, en su mundo cotidiano sí; tomates, pepinos, alcachofas y todo tipo de frutales…

Pregunta. La hoja de ruta de esta entrevista tiene muchas paradas, una de ellas el senderismo, una de tus aficiones. ¿Anda la sanidad por senderos oscuros?

Respuesta. Oscuros no lo sé, pero muy complicados sí. Actualmente desde que empezaron con los recortes existe un afán por ahorrar dinero a costa de los profesionales, lo que provoca una presión asistencial bárbara porque no hay sustituciones, ni reposiciones y se doblan turnos, guardias y encima se les rebaja el sueldo. Afortunadamente la sanidad sigue su marcha por el celo profesional, que es vocacional.

P. El huerto es parte de tu vida. En tu caso, la realidad supera la ‘afición’ y te metes en el fango, ¿en todas tus facetas?

R. Cuando me pongo a trabajar me meto a fondo. Lo intento hacer lo mejor posible y totalmente, hasta el final. Me gusta ser perfeccionista.

P. ¿Se está pasando la cosecha en algunas cuestiones sanitarias?

R. Hay cuestiones que tenían que estar ya desarrolladas como las OPEs. Ahora con las elecciones parece que se están dando más prisa, pero no es suficiente. Las administraciones tienen que gastar el dinero en sanidad en vez de en asesores y similares. Además, para que funcionen mejor los fondos tienen que ser finalistas, no se pueden derivar de otros sitios y la gestión tiene que ser profesional, no con gestores puestos a dedo.

P. En época de sequía, ¿todavía hay margen para regar el sistema?

R. Por supuesto. Aunque es importante saber utilizar ese agua. Es decir; qué categorías profesionales están deficitarias o qué partidas presupuestarias necesitan más recursos. Ahora dicen que estamos en sequía, pero para otros asuntos sí que hay agua. Hay que saber regar en el sitio más rentable y donde verdaderamente hace falta.

P. ¿Te sirve el huerto para evadirte?

R. En el momento en el que estoy en el huerto me meto de cabeza, tengo una satisfacción completa y total de lo que estoy haciendo. Y en mi trabajo pasa lo mismo, tanto el de médico como el de sindicalista. Intento hacerlo lo mejor que puedo, siempre me entrego totalmente.

P. ¿A qué le dedicas más tiempo?

R. A mi trabajo

P. ¿Se están tratando con pesticidas asuntos sanitarios para tapar problemas?

R. Se intenta derivar la atención de un tema importante a otro, pero no se llega a usar pesticidas, que para mí son tóxicos. Sí se intenta no abordar los problemas como se tiene que hacer, y muchas veces se les echa un manto político.

P. ¿Pico y pala es lo que se necesita en el SNS?

R. Mucho. Pero pico y pala sabiéndolo utilizar. Ambas herramientas son necesarias para hacer un trabajo duro.

P. ¿Cómo es el huerto de Fernando?

R. Es maravilloso. Es plural como es mi vida, hay de todo. Yo empecé con esto medio en broma pero da gusto ver la producción que vas teniendo, siempre excesiva porque siempre plantas más y más. Ten en cuenta que los productos que salen del huerto de Fernando son auténticos, totalmente naturales, y saben a lo que tienen que saber. Cuando tú te comes un tomate estás comiéndote la mata del tomate, aunque haya plagas siempre intento solventarlo de forma natural.

P. Hablando de plagas, ¿cuál dirías que es la última invasión en sanidad?

R. El afán economicista que está rigiendo la sanidad en España. Y a esto súmale la plaga de cargos intermedios que existen y son innecesarios, y que además hacen una gestión equivocada.

P. ¿Tendría que ser el Pacto la buena hierba del SNS?

R. Sin duda. El Pacto tendría que hacerse con un consenso lo más extenso posible, pero es complicado. El problema son las trasferencias del SNS a las 17 autonomías, aunque sean buenas para unas cosas, para otras no lo son. Hay temas que deberían estar regida desde el ministerio. Sanidad tiene capacidad para hacer determinadas leyes de obligado cumplimiento para el SNS, pero no lo hace.

P. ¿A quién invitarías a tu huerto para recoger tus frutos?

R. Depende de para qué, si es para visitar o para comer en el huerto. Yo tengo muchos amigos dentro de la plana sanitaria, muy buenos profesionale a los que invitaría a comer. Pero invitaría también a los responsables sanitarios y de RR.HH. de las 17 autonomías y del ministerio. Sentarlos en el huerto en una mesa grande, invitarlos a coger fruta y a que todos comieran del mismo plato. Sería ideal y se unificaría el SNS.

¿A quién sacarías del huerto? A nadie.

¿A quién te llevarías? A todos, porque el huerto sirve para llegar a acuerdos.

¿A quién regalarías unos buenos tomates?
A quién me lo pida.

¿Con quién darías un largo paseo? Con Carlos Moreno o Javier Castrodeza, intentaría convencerlos para que utilizaran la ley para unificar el SNS.

Paco Miralles tiene un tractor amarillo…
yo tengo una mula mecánica roja.