José A. Rodríguez Barcelona | viernes, 01 de abril de 2016 h |

El primer estudio que compara sarilumab (en desarollo por Sanofi y Regeneron) con adalimumab (comercializado por AbbVie como Humira) demuestra que el primero es más eficaz en la mejora de los signos y síntomas en pacientes con artritis reumatoide (AR) activa a las 24 semanas de tratamiento. Una importante novedad en el tratamiento de esta patología, comenta Antonio Gómez, coordinador de la Unidad de Artritis Reumatoide del Hospital Parc Taulí de Sabadell, “ya que por primera vez un tratamiento en monoterapia demuestra que es superior a un anti-TNF en la artritis reumatoide”. En la actualidad, el tratamiento estándar consiste en combinar una terapia biológica (como es el caso de adalimumab) con metotrexato. Pero, como señala Gómez, “hasta un 30 por ciento de los pacientes no toleran el metotrexato o este fármaco no es suficientemente eficaz en ellos”.

El citado estudio avala que sarilumab es una adecuada alternativa a adalimumab (el bloqueador del TNF más utilizado a nivel mundial) para aquellos pacientes que deben ser tratados en monoterapia. La vía de acción de ambos fármacos son diferentes. Mientras que los anti-TNF actúan como inhibidores del factor de necrosis tumoral (TNF), sarilumab bloquea la IL-6. “Esta diana terapéutica está relacionada con muchos de los síntomas sistémicos de la enfermedad, como es el caso de la anemia, la fiebre o la fatiga”, comenta Gómez. De este modo, añade este experto, “el hecho de que se trate directamente esta diana hace que se puedan combatir mejor estos síntomas”. Si se acaba aprobando este medicamento, “tendremos ya dos anti-IL6 para aquellos pacientes que deben ser tratados en monoterapia”, explica Gómez.

‘Head to head’

Este experto también valora muy positivamente el diseño del estudio, ya que se trata de un head to head entre sarilumab y adalimumab. “Hasta ahora, las únicas comparaciones que teníamos entre fármacos biológicos eran indirectas, ya que se realizaban entre estudios con poblaciones distintas, por lo que siempre existía la polémica sobre qué tratamiento era mejor”, señala Gómez. El hecho de que en este estudio se comparen las mismas poblaciones de pacientes “hace que los resultados sean muy robustos”, según este experto.

El estudio (Saril-Ra-Monarch) incluyó a 369 pacientes adultos con artritis reumatoide activa que mostraban una respuesta insuficiente al tratamiento con metotrexato, que eran intolerantes a dicho tratamiento o que no eran candidatos adecuados para recibirlo. Se aleatorizó a los pacientes para que recibieran, o bien adalimumab en monoterapia (40 mg cada 2 semanas), o bien sarilumab en monoterapia (200 mg cada 2 semanas) por vía subcutánea. El criterio de valoración principal fue el cambio respecto al momento basal en el índice de actividad de la enfermedad usando la velocidad de sedimentación globular (DAS28-ESR: Disease Activity Score using the Erythrocyte Sedimentation Rate) a las 24 semanas de tratamiento. Dicho criterio demostró una diferencia estadísticamente significativa a favor de sarilumab (-3,25 en el caso de sarilumab en comparación con -2,22 en el caso de adalimumab, p inferior a 0,0001).