Cardiología/ Apoya el cambio a procesos asistenciales y la regionalización de las UAAC
br
E.S.C.
Madrid
Con el objetivo de poner a disposición de la Administración, gestores y profesionales sanitarios criterios para la organización y gestión de las Unidades Asistenciales del Área del Corazón (UAAC), y contribuir a la mejora en las condiciones de seguridad y calidad de su práctica y a la eficiencia en la prestación de los servicios, diseño y equipamiento, se ha elaborado el documento Estándares y Recomendaciones de Calidad y Seguridad para la asistencia cardiológica.
Desarrollado por un comité director y otro científico (en los que han participado las sociedades españolas de Cardiología y Cirugía Torácica-Cardiovascular, y la Asociación Española de Enfermería en Cardiología), se basa en tres ejes fundamentales: el cambio de episodios hacia procesos asistenciales y la gestión clínica a través de los mismos; la regionalización de las UAAC para lograr una mayor eficiencia y equidad; y la necesidad de crear redes asistenciales para el adecuado manejo de los pacientes, especialmente en la enfermedad coronaria, determinando cómo deberían organizarse los recursos en el área del corazón (clínica, imagen, hemodinámica e intervencionismo, arritmias, electrofisiología y cirugía cardiovascular).
Según esto, la asistencia debe organizar su actividad en torno a Unidades Asistenciales que serían de dos tipos: Básicas (presentes en todos los Servicios), e Intervencionistas (sólo en determinados hospitales y que son “compartidas” trabajando en red).
Además, se sugiere que, para que la asistencia prestada en estas unidades (especialmente las intervencionistas) sea de calidad, segura y eficiente, se dote de servicio de cirugía cardiovascular o de intervencionismo solamente a aquellos hospitales que realicen un mínimo de 400 procedimientos anuales de intervencionismo coronario percutáneo. Un número inferior a éste sólo estaría justificado para las Unidades Satélites, que serían atendidas por el equipo de la Unidad de referencia. También se recomienda llevar a cabo al menos 600 intervenciones quirúrgicas cardíacas mayores al año por centro.