Rocío Chiva Enviada especial a Copenhague | viernes, 16 de octubre de 2015 h |

Tras la presentación a finales de marzo, en la 73º Reunión de la Academia Americana de Dermatología (AAD), celebrada en San Francisco, de los datos de extensión a dos años de los estudios Erasure y Fixture, de evaluación de la eficacia del tratamiento con secukinumab, comercializado como Consentyx por Novartis, en pacientes con psoriasis en placas de moderada a grave, ya se conocen resultados de seguimiento de estos pacientes a tres años —en esta ocasión, procedentes del estudio de seguimiento A2304E1, un ensayo multicéntrico, doble ciego y abierto de cuatro años de duración de los ensayos fase III Sculpture y Stature—.

Los datos, que se han dado a conocer durante el 24º Congreso de la Academia Europea de Dermatología y Venereología (AEDV), confirman prácticamente las cifras de eficacia ya obtenidas anteriormente. Concretamente, el ensayo revela que hasta un 83 por ciento de los pacientes están en PASI75 al tercer año de tratamiento, frente al 88 por ciento a los dos años que señalaban los estudios Erasure y Fixture, presentados en la AAD.

Unos porcentajes bastante similares en el tiempo que no solo se mantienen con mejoras del 75 por ciento, sino también con mejoras del 90 y hasta del cien por cien. Con un 69 por ciento de pacientes en PASI90 en el primer año (estudio Sculpture) y un 71 por ciento al segundo año (estudios Erasure/Fixture), los datos presentados en este Congreso muestran que aún el 64 por ciento de los pacientes psoriásicos mantienen esta respuesta a los tres años. En cuanto a PASI 100 —44 por ciento en el primer y en el segundo año (estudios Sculpture y Erasure/Fixture, respectivamente) y 43 por ciento en el tercer año—, los porcentajes se mantienen casi invariables.

Asimismo, se han presentado también nuevos datos de eficacia en psoriasis en placas de moderada a grave con fármacos como ustekinumab o tofacitinib y nuevas indicaciones con adalimumab. Tanto es así que Rosa Izu, jefa de Sección del Servicio de Dermatología del Hospital de Basurto, reclama incluso la necesidad ahora de investigar en psoriasis leve.

Buenas noticias para una patología sistémica que, como recordó Antonio Martorell, adjunto al Servicio de Dermatología del Hospital de Manises, aumenta el riesgo de patologías cardiovasculares y hepáticas. En el primer grupo, Martorell destacó el engrosamiento de los vasos sanguíneos a nivel de corazón y el incremento del riesgo de sufrir un infarto de hasta dos puntos. En cuanto a patologías hepáticas, este especialista subrayó la importancia de considerar el mayor riesgo de esteatosis hepática de estos pacientes cuando acuden a consulta.

Urticaria crónica espontánea

Otra de las patologías protagonistas del Congreso ha sido la urticaria crónica espontánea (UCE), un campo con una tradicional escasa presencia en este tipo de reuniones científicas. Así, por ejemplo, un estudio liderado por Ana Giménez-Arnau, responsable de la Unidad de Urticaria del Hospital del Mar, ha identificado una “firma genética específica” en estos pacientes, distinta a la de sujetos sanos. En concreto, el estudio destaca la sobrexpresión de genes correspondientes a proteínas que ejercen una función de barrera epidérmica sobre todo, tales como la filagrina, corneodesmosina, desmocolina-1 o queratina10, entre otras.

Una “firma” que podría revertirse tras el tratamiento con omalizumab, un anticuerpo monoclonal recién aprobado en España para la UCE, tal y como ha demostrado otro de los estudios presentados en el Congreso. Según los datos del ensayo, más del 75 por ciento de esta “firma de UCE” podría convertirse en expresión cutánea normal tras el tratamiento con este fármaco, un resultado que coincide además con una mejoría clínica en estos pacientes.